One-shots e Historias Recopilatorias ZoSan

Insulte moi

Summary: Zoro molesta a Sanji, su novio francés, de diferentes formas para que este le insulte.

Notas: Sanji habla en francés, traduzco en comentarios. Zoro es muy molesto, pero creo que le pone cachondo el acento de Sanji.

ˏˋˏˋ((🌿))

Para definir su relación, debías de pensar primero en los participantes de ella. Uno era un hombre nipón, aburrido, gruñón y malhumorado, al contrario, su pareja era un mujeriego, guapo, simpático y grosero francés. Los dos sin embargo, dejando de lado las diferencias culturales, eran un par de novios que se amaban de forma muy profundas. Zoro encontraba cierto encanto maduro en Sanji y Sanji admiraba en Zoro su fortaleza mental.

Aunque no tenían muchos problemas entre los dos, todo empezó a torcerse cuando las palabras de Nami, que era una amiga de los dos, no abandonaron la cabeza de Zoro.

—El francés es un idioma bonito no crees —decía ella, tomándose un chocolate caliente—, no importa si insultan, es tan refinado.

Zoro no se tomó en serio sus palabras. Estaba comiendo un delicioso pan caliente y la mano de Sanji estaba acariciando suavemente su cabeza, obvio no iba a escuchar a la chica. No obstante, al otro día, cierta idea vino a su mente.

—Ça fait un moment que je te dis de te lever, merde !

Zoro miró al blondo, que estaba viéndolo desde la puerta del cuarto con un cucharon en la mano. Le acababa de decir que por favor quitara su culo de la cama porque tenía que ordenar, pero también le insulto.

—Zoro !

Le insulto y no sonó...no sonó tan mal. Un poco turbado por esa resolución, sintió que el rubio lo pateaba hacia un costado.

—Au boulot idiot !

El peliverde sintió un estremecimiento por todo su cuerpo ¿Qué demonios le pasaba? El problema con eso fue que, mientras más errores cometía, más Sanji le regañaba. De modo que, con las pocas neuronas que le habían quedado luego de caer rendido por él, empezó a hacer todo lo que sabia molestaría a Sanji.

Para eso, Zoro enumeró las cosas que probablemente lo harían ganarse un insulto. No quería decirle la verdad porque resultaba vergonzoso admitir lo encantado que estaba con su acento, y tampoco podía comentarle lo mucho que le calentaba. Lo vería como un rarito.

Sin preocuparse por las consecuencias, siempre podía ganarse un insulto gratis haciendo esto, por ejemplo:

—Zoro, passe moi la vaisselle sale.

En la cocina, luego de almorzar, Zoro estaba ayudando. A veces se turnaban para lavar y secar, pero esta vez Sanji pidió la primera tarea. En este caso, Roronoa debía de pararse y tenderle lo que pedía, pero a cambio, se enderezó suavemente.

—Zoro?

Sanji era el típico chico que por cosas tontas se molestaba, y por eso, cuando lo agarro de la cintura y le beso con fuerzas, con la boca después de comer (Porque Sanji odiaba besar luego de comer) recibió una avalancha enorme de insultos.

—Trou du cul, brosse-toi les dents en premier, tu sais quoi faire cette merde !

Guardándose una risita, escapo antes de que le diera una patada por su estupidez. Sanji gruñó y empezó a botar el humo de su cigarrillo como si fuera una tetera hirviendo.

—Ven ici bâtard !

ˏˋˏˋ((🌿))

A medida que seguía siendo un fastidioso, más le afectaba que lo insultase, por eso, se decidió por ir algo más personal.