One-shots e Historias Recopilatorias ZoSan

No dejemos escapar lo que sentimos

Summary: Gracias a una inesperada reunión en donde se reúne todo el grupo, Sanji y Zoro podrían por fin decirse que se quieren.

Notas: Cortico, contiene canciones viejitas, errores ortográficos (¿?) mugiwaras borrachos.

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Aunque era muy extraño que todos estuviesen en el mismo sitio, siendo que estaban demasiado ocupados en sus propias vidas, el grupo unido seguía siendo el mismo de siempre. Luffy se había comido más de la mitad de los platos del menú y seguía atragantándose de la risa gracias a los recuerdos que traía a su memoria cada que hablaba con Franky. A su lado, Zoro estaba con la frente sobre la mesa mientras que Usopp contaba las burbujas dentro de un vaso de cerveza.

—Oigan, ¿Zoro está bien?

—No le hagas caso Robin —dijo Usopp, con una sonrisita jubilosa sobre el rostro—, se despertará apenas traigan la otra bandeja de cerveza.

—¿Y COMIDA?, ¡quiero más comida!

—No Luffy, ¡siéntate! —El joven se desinfló—, la que invito hoy fue Nami, sé más considerado.

—Pero quiero comida...

—Yo te compro más, ¿qué quieres? —ofreció Robin.

—¿En serio?, ¡gracias!

—Lo mimas mucho— dijo Usopp, volteando la mirada hacia la pista.

En ella, estaba Nami bailando con Sanji (puesto que estaba demasiada ebria como para entender que era Sanji quien la sostenía) y seguían mejilla a mejilla, balbuceando y dando vueltas.

—Nami...te amo tanto...

—No me digas eso a menos que seas millonario —respondió, con voz chirriante—. Oye... ¿si vas a llevarme a casa?, no tengo auto...

—Lo que sea por ti—expresó Sanji, con las mejillas encendidas de un rojo intenso—, aunque como estoy un poco borracho...así no puedo manejar.

—Nah, tranquilo. —De pronto empezó a sonar un tango suave y rápidamente Sanji cambio la postura. Nami se acomodó sin rechistar— Yo manejo. Un par de vasos de agua y estoy...estoy de vuelta.

Dando vueltas y vueltas por toda la pista, luego de un rato Zoro levantó el rostro de la mesa con el ceño fruncido y la frente roja por el golpe. Vio el vaso vacío que tenía en la mano y levantó el brazo súbitamente.

—¡Más cerveza!

—Ya las pedimos idiota.

—Tu hígado no te lo va a agradecer Zoro —El peliverde miró a Robin como si tuviera dos narices y tres bocas y luego volvió a gritar que quería más bebida.

—¡¿Por qué se demoran tanto?!

Mareado, con la garganta caliente y el rostro hirviendo, miró por encima de su hombro y encontró a Sanji y Nami bailando juntos, apretados uno contra el otro. Estaban tan desorientados que no seguían el ritmo de la canción si no que se balanceaban entre ellos como una decoración colgante.

—Aquí están sus cervezas, ¿se les ofrece otra cosa? —Robin mostró la carta del menú y señaló una página completa, pues era lo que Luffy le había pedido de comer, luego Roronoa acercó tres cervezas de las cinco que habían traído y las reunió a su alrededor.

—¡Hey hermano, son para todos!

—Mías —exclamó el hombre—¸ahí les dejo dos.

—¡Yo también quiero cerveza Zoro!