Belleza Canina

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Summary: El pastor alemán Zoro Roronoa odia a lo perros irritantes, altivos y dependientes, lastima la invitada de Robin tiene un canino con todas esas características.

ADVERTENCIAS: Au de perros, a la autora le encantó escribir esto, como siempre hizo a SANJI hermoso y Zoro un baboso. Zoro es un perro alemán y Sanji un galgo afgano. ( foto abajo por si algo) OCC(?) errores de ortografía, etc.

Notas: me ENCANTÓ escribir este one-shot, porque aunque sea una persona de gatos, aprecio la belleza, y vaya que hay perros hermosos. Pensé que Zoro seria un doberman, pero luego recordé al perro alemán y se me paso.

ˏˋ((🌿)).

—Zoro, hoy tenemos visita — dice Robin, llamando la atención del durmiente pastor alemán—, una amiga mía ha vuelto de Francia y quiere verme, ya sabes lo que significa eso ¿cierto?

Roronoa se asustó ante la dulce sonrisa de su dueña y se levantó de su lugar listo para  correr. Nico intentó agarrarlo y el perro retrocedió y se escabulló. Sus fuertes y grandes patas le permitieron escaparse rápidamente y Nico suspiró.

—Solo es una baño Zoro, un baño y un lindo moño.

Roronoa la miró receloso, con su penetrante ojo negro, pero la mujer se acercó de nuevo y esta vez el perro no huyó.

—A mi no me hagas ese rostro desconfiado, tus años de intimidación ya acabaron. 

 Se dejo acariciar un poco el lomo y la dejo hacer. Era un perro ex policía, entrenado para atacar, proteger y matar si era necesario. Luego de perder su ojo, a pesar de tener una buena capacidad física, reclutaron a jóvenes pastores alemanes y de pronto fue sacado y entregado a Robin, que era rica, hermosa y cariñosa.

No se podía quejar claro, pero extrañaba taclear humanos y capturarlos.

—Ella también tiene un perro, espero que te lleves bien con él. 

 Le escuchó, mientras que se dejaba dar un baño en la reluciente bañera. Se miró  en el espejo de la pared mientras que sentía unos curiosos dedos revisando sus orejas y se lamió los dientes.

—Ya sé que te gustaría que fuera una linda perrita, pero Nami me ha dicho que su perro es realmente hermoso.

La volteó a ver y Robin entendió lo que trataba de decirle, a él no le importaba las perritas, ni la belleza, con que no fuera irritante ya era suficiente.

—Lo sé lo sé, esta vez comparte tus juguetes ¿si?

Robin abrió la regadera, y cuando el agua lo mojó se sacudió desde la cabeza hasta la cola y Nico se cubrió con un sombrilla ( un poco ya acostumbrada) y le siguió restregando hasta que lo sacó y le paso la toalla.

Sin muchas ganas de negarse a los pedidos de su dueña, disfruto el momento cuando le paso el secador y solo gruñó al momento de probarse los moños.

—Este te queda bien ¿te gusta? — Ladró al momento de verse al espejo, estúpido moño rojo—,bien, ¿que tal uno verde?

Se vio un momento apreciando el color, y para dar su aprobación se sentó y vio a Robin

—Me alegra que te guste.

Con una ligera caricia en la cabeza y lomo, lo llevó a comprar algo ( lo hizo salir con el estúpido moño) y lo dejo dormir un poco más en la alfombra hasta que llegaron los invitados.

ˏˋ((🌿))

Cuando escuchó el timbre, abrió el ojo perezosamente y atendió al ademan de Robin irguiéndose, luego ella abrió la puerta y se escucharon estruendosos chillidos de la invitada, que parecía sumamente feliz de volver a ver a su amiga.

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