The Last Witch [JiHanCheol]

Fifteen

—Lo lamento, no debí actuar de esa manera. Entiendo que estés enojado, tienes todo el derecho de estarlo, me comporté estúpidamente.

El demonio aprieta el volante entre sus manos mientras voltea a ver a un lado. La maceta con un pequeño tallo está sobre el asiento de copiloto; el silencio inunda el carro.

Una vez más revisa su celular.

"Iré con Jeonghan hyung a un bar llamado Diamond, le pedí que fuéramos juntos porque me voy a encontrar con un amigo pero no quería llegar solo, usted también puede venir, mi amigo Hoon tocará a las 20:00 hrs"

"Hyung ha estado algo triste, no me dice porque pero supongo que a usted si le dirá, deberían hablar"

Jisoo suspira y deja caer su cabeza entre sus manos, su frente choca contra el volante. Vuelve a tomar una inspiración y sale del auto dejando las flores detrás.
Lo correcto es disculparse con él en un lugar privado, tranquilo, un lugar donde se sienta cómodo... Tal vez no debió haber traído las flores hasta acá. Tal vez debió haber esperado a que llegarán a casa.

El demonio llega hasta la entrada del lugar, entra de manera tranquila escaneando el lugar.

Humanos y algunas hadas, pero nada fuera de lo común; su vista sigue hasta topar con una cabellera rubia y dos ojos rasgados cerrados casi en su totalidad.

Jisoo camina hasta la mesa con los dos individuos, la risa de Soonyoung cesa pero vuelve a sonreír amigablemente.

—¡Hyuuuung! Que bueno que si lograste llegar. ¡Oh! Te presento a Jihoonie.

La otra parte se voltea y saluda con un asentimiento de cabeza por lo que el demonio hace lo mismo.

—Hola—saluda cortésmente—Soonyoung, ¿y Jeonghan?

—Oh, fue al baño, pero aún no regresa—explica señalando los baños.

—Gracias, vuelvo enseguida.

El demonio camina en la dirección señalada, abre la puerta pero el cuarto está vacío, las puertas de todos los cubículos están abiertas, también están vacíos.

—¿Han?—no hay respuesta.

Jisoo frunce el ceño para luego salir del lugar con la puerta cerrándose detrás de sí, vuelve a observar los alrededores, encuentra de nuevo la mesa del rubio y su amigo, pero no hay señal del otro pelinegro.

Decide caminar por el bar buscando con la mirada, hasta que da con una mata de cabello que reconocería en cualquier lugar.

El demonio sonríe ligeramente, Jeonghan se ve precioso.

Su expresión se deforma al mismo tiempo que observa como un cuerpo rodea y cubre el del contrario, sus cuerpos están muy juntos.

Jeonghan no está solo, esta bailando con alguien más.

Sus cuerpos están muy juntos, la sonrisa de Jeonghan se ve claramente, se mueven de forma rítmica; un sentir incómodo presiona su pecho.

Jisoo no sabe que hacer, está congelado; siente su corazón golpetear furiosamente contra su pecho. Todo empeora cuando dos pares de labios chocan entre sí; un mal sabor llena su cavidad bucal.

Siente su sangre recorrer sus venas y arterias, sus sentidos se agudizan y el enojo lo rodea, de forma rápida llega hasta ellos tomando el cuello de la camisa del desconocido.

—¡¿Qúe mierd-...—la voz de Jeonghan queda en el aire al fijar sus ojos en el chico frente a él—Jisoo—susurra.

La mirada de Jisoo transmite una parte de lo que siente en este momento, tratando de controlar sus emociones, tratando de suprimir su ira, mierda, piensa el demonio. Evade los ojos de Jeonghan y dirige la mirada hacia el desconocido quien le sonríe después de ser soltado.