XV

154 28 0
                                    

Después de el pequeño momento de hermanos y de hablar con el serafín, este recomendó a Taehyung no usar tanto sus alas a menos que fuera necesario. Él se opuso al principio pero después logramos convencerlo.

Caminaba de vuelta al castillo, pero decidí dar un paseo sola para calmar mis pensamientos.

A lo lejos, pude notar a Jungkook con las alas abiertas y junto a él estaba ella, la peliroja que aprovecha cada momento para lanzarse a alguien que no le puede corresponder como ella quisiera. Con esos sentimientos molestos, regreso al lago. Mala decisión pues ellos estaban acercándose también a este.

Cómo puedo, logro esconderme detrás de unos cuantos arbustos. Justo a tiempo, pues ellos caminan cerca del lago.

–Y este es el lago de la sabiduría, el Serafín dijo que era parecido al bosque de la penumbra y bloquea el ligamen–, explica el chico, parece que le está dando un recorrido a Kendra

–Deberías acampar aquí y así ya no sería una molestia para ti–, ¿acaso eso fué una broma?, Es tan molesta.

Jungkook sonríe leve, claro yo intento hacer cualquier broma con él y nada funciona, pero aparece la peliroja con grandes pechos y es lo más gracioso del mundo.

–Espera un segundo mi padre quiere comunicarse–, ella habla y después se aleja un poco 

Me quedo sentada en mi lugar, simplemente mirando el lago. Jungkook camina un poco y parece que el destino me odia, pues de todo el espacio que hay, viene y se topa conmigo.

Puedo sentir su mirada pesada en mí, más no hago nada, sigo con la vista perdida en el lago.

–Es muy infantil de tu parte seguir a las personas y escuchar lo que dicen–, suspiro

–Yo ya estaba aquí, ustedes llegaron después–, respondo aún sin verlo

–¿No escuchaste a tus hermanitos?, Deberías tratar tú también de no estar tan pegada a mí–, bufo ante su comentario

–Repito, yo ya estaba aquí, ustedes llegaron después–, esta vez si volteo a verlo y me paro para quedar frente a él

–¿Crees que no sé lo que sientes por mí?, Puedo sentir todas y cada una de tus emociones Arabella. No creas que no se como te emocionas cada vez que me ves llegar y como te pones celosa si Kendra o alguna otra chica intenta acercarse a mí–

–¿Y eso qué?, No cambia nada entre nosotros. Tú estás obligado a estar conmigo y yo no sé porque no puedo sentir el ligamen, así que ambos estamos jodidos–, digo y él se ríe con burla

–¿Estamos?, Soy yo quien tiene la peor parte, yo siento todo mientras tú solo vives con tranquilidad sabiendo que voy a estar cerca para cuidarte, ni siquiera haces un esfuerzo por tratar de mejorar en tú don y solo vives con las alas escondidas. Yo no quería esto y si alguna vez pensaste que podía corresponderle a tus sentimientos pues, estás equivocada, porque estoy cansado de siempre tener que estar cuidándote y no poder controlar lo que siento cuando el ligamen reacciona por mí–

Yo sabía que él no estaba feliz con nuestra situación pero escucharlo de sus propias palabras es bastante doloroso para mi corazón.

–Bien, no pretendo que me quieras como yo lo hago porque se que no será así. Solo trataba de ser amable y empática con lo que sientes para al menos lograr caerte bien y pudieras tenerme algo de confianza–, suspiro un poco, tragando el nudo en mi garganta que ya se había formado, –Solo dime, ¿Alguna vez realmente te preocupaste por mí?–, él se queda completamente en silencio, simplemente mirándome con pesar, –Olvidalo, trataré de no ser más una molestia para ti–

𝕃𝕀𝔾𝔸𝕄𝔼ℕDonde viven las historias. Descúbrelo ahora