{37} Hσƞestɑ Ebɾieɗɑɗ

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Debía ser medio día para cuando salimos de restaurante

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Debía ser medio día para cuando salimos de restaurante. El sol estaba en lo más alto y su calor era tan abrazador como para calentar mí piel a través de la camisa. Los vendajes apretaban mi cuerpo , como ataduras firmes que me limitaban el movimiento , si un enemigo llegará ahora me sería difícil estirarme con comodidad. Por lo menos podía caminar , aunque el agotamiento y la falta de sueño me estaban pasando factura mucho antes de lo que pensé.

Algo de sudor caía por mí espalda y mí cuello a causa de la temperatura , espero que eso no la moleste. Se ve tan tranquila durmiendo que me daría pena interrumpirla.

Esperar no era mí fuerte , pero tampoco estaba en condiciones de irme por ahí a explorar , tengo heridas que me escuecen cada vez que me muevo y mí trabajo ahora es cuidarla a ella. Por todas esas razones juntas , ahora estaba en la tediosa situación de tener que ser paciente , paseando mirada por mis alrededores esperando que algo divertido suceda y me entretenga durante el tiempo que tengo que seguir aquí.

Pasto aburrido , árboles aburridos , gente aburrida. Con suerte una mariposa de colores brillantes volaba por encima de mí nariz , pero si no puedo perseguirla es lo mismo que nada, todo era absolutamente soso. ¿Cómo pueden vivir aquí toda su vida , sin una pizca de adrenalina? Llevo años cruzandome con personas así y sigo sin comprenderlo. ¿Que sentido tiene vivir si no vas a vivirlo al máximo?

Dejando de lado aquellas cosas que probablemente nunca voy a comprender , Nami aún debía estar adentro pagando. Su cara cuando el dueño extendió su mano en dirección a ella para que le dé el dinero no fue nada bonita , casi dejo de parecer una chica en cuanto su rostro se ensombrecio y la rodeo un silencio aterrador. Lo más seguro es que este molesta con nosotros , pero teníamos tanta hambre que nos fue imposible no pedir todo lo que estaba en el menú. Entre carne y licor , al menos logré conocer una nueva faceta de Mercy.

Jamás imaginé que pudiera ser tan torpe y melosa. Era como una versión contraria de la Mercy que conozco. En una hora me abrazo más veces de las que lo hizo en cuatro días y como no podía mantenerse en equilibrio termino apoyada en mí hombro y después de media hora se durmió con sus brazos sobre la mesa para hacerle de almohada a su cabeza. Estaba tan hundida en su pereza que por un momento me asusté , creí que se había desmayado porque cuando la llamaba no respondía.

Luego recordé que duerme profundo como un oso en hibernación y me tranquilice. Ahora mismo , a mí lado está Zoro. Se bebió cinco botellas y tiene suficientes vendajes como para pasar desapercibido como una momia si se lo propone. Aún con todo eso , seguía de pie , ni siquiera se tambaleaba. Es posible que Nami se refiera a esto cuando nos pregunta si somos humanos. Aunque fuimos los que peor resultaron de esta aventura , yo siento que todavía estoy lejos de mí límite , pero no creo estar en condiciones de seguir peleando.

A diferencia de nosotros , Mercy...

_ ¿Estás seguro de que la quieres cargar tu? Eres más delgado y estás herido _ Me cuestionó Zoro , mirándome de reojo con una ceja alzada. Yo en cambio,  baje mí mirada y la observé a ella. Mercy había caído totalmente inconsciente hace unos veinte minutos , ahora estaba babeando sobre mí hombro mientras la llevaba entre mis brazos y en las manos de ella estaba esa bolsa de tela que trae consigo hace rato.

ᑭOᖇᑫᑌᕮ ᗰᕮ ᗪIᐯIᕮᖇTᕮS \\ᒪᑌᖴᖴY X OC\\Donde viven las historias. Descúbrelo ahora