*Levi y tu* Una promesa de niña (SNK)

5° Limpieza ante todo. ~caligrafía~

POV _____(tn)

Caminaba por uno de los pasillos del cuartel. Ya habían pasado un par de días desde mi llegada a esta fortaleza del cuerpo de reconocimiento y desde entonces no han parado las profundas jornadas de limpieza que el Capitán exigía -según Hanji-san no es solo para diciplinar a los soldados como técnica de obediencia, también es para satisfacer la obsesión compulsiva de Levi-, junto al resto de los novatos, estaba encargada de la limpieza de los establos, el cuartel en general y los alrededores.
Sin embargo, no me molestaba mantener el ambiente aseado, todo lo contrario, sin importar los esfuerzos inhumanos que se necesitaban para cumplir aquella labor al pie de la letra, el resultado me dejaba muy tranquila. Ciertamente no me había recuperado por completo de lo ocurrido hace años atrás.

Me tope con la Vice-capitana quién cargaba consigo una enorme resma de papeleo; su rostro brilló al verme y casi dio un brinco de alegría, se acerco a mi rápidamente sonriendo de manera traviesa.

− ¡oh! ¡_____(tn)-chan! Justo a tiempo...
− Hanji-san, ¿necesita algo? -pregunte curiosa. A pesar de que me había pedido nada de formalidades, se me dificulta un poco tutearle a un superior.
− Lleva esto con Erwin, por favor. -ordenó entregándome todos las hojas,- No tengo tiempo suficiente para llegarme a donde esta él.
− ¿ehh? ¿E-Esto que es?
− Los del congreso siempre están molestando, no están de acuerdo respecto a los ideales que la mayoría seguimos... el querer salir de las paredes y vivir libres puede considerarse alta traición ¿No les basta con oponerse a que nos den recursos para re abastecernos? Y ahora están demandando a ciertos soldados de puestos importantes...
− Ya veo... iré con el comandante ahora mismo. -acepte con gusto, no tenía nada más que hacer.
− ¡Gracias! -exclamo sonriente y entregándome todo de golpe- ¡te adoro!

Solo pude sonreírle nerviosamente, creo que me acostumbraría a su forma cariñosa forma de ser. Fui con cuidado de no dañar las hojas a la oficina del comandante, jamas me había puesto en el lugar de alguno de ellos, no solo deben cargar con la vidas de los soldados, sino también enfrentarse a esta clase capitalista y glotona que solo viven pensando en sí mismos... llegue a pensar que la única forma de acabar con los titanes y ser libres es trabajando en conjunto y apoyándonos los unos a los otros... Si estoy en lo cierto, han de pasar muchos años para que esto ocurra.

Cuando llegué a mi destino, toque la puerta tres veces, escuche una voz tersa y profunda permitiéndome el paso, al entrar a su oficina me apresure en presentarme, habría mostrado el saludo de la legión si no tuviera tantas hojas en mis brazos.

− Comandante, Hanji-san me pidió que le trajera esto... -me quede de pie en medio del lugar, el subió la mirada y observó la torre que traía.
− ¿Tú eres.... _____(tn)? -preguntó casi adivinando.
− Si, señor.
− ¿Tantos...? -preguntó para si mismo soltando un suspiro. Al parecer también se cansaba de llenar papeles,- Gracias, ____(tn)... antes que te vallas, ¿tienes letra legible?
− ¿Eh? Uhmm... supongo... -por más que trate de darle una respuesta concreta no pude, me tomo por sorpresa.
− Bien, me gustaría que me ayudaras a ordenarlos y llenarlos.
− Si, señor.

¿Qué era esto? Se supone que un comandante debe mostrarse feroz y temible, o eso pensaba. Desde un principio me llamó por mi primer nombre y ahora me pedía que le ayudara, tampoco me negué. Aquella forma de ser me recordó a mi hermano mayor. Que nostalgia.
Así estuve por media hora: sellando, marcando y llenando papeles.

POV narrador

− Tienes una linda letra -añadió sin levantar la vista de su trabajo-, es muy pulcra.
− Gracias, no me gustan los garabatos.
− Estoy seguro que a Levi le gustaría... -preguntó con el fin de observar la reacción de la soldado. Era un hombre listo y visionario, existían muchas cosas que el veía, pero que el resto ignoraba.