Closer [Kookmin au] 📘

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2/4 💛 CAPITULOS FINALES

Siento mi cuerpo desnudo bajo las sabanas, los brazos de Jungkook me rodean con tanta fuerza que me hace pensar que tal vez sabe lo que estoy a punto de hacer.

Aún siento cada centímetro de mi cuerpo arder gracias a él, los latidos de mi corazón siguen sin tranquilizarse ni siquiera un poco.

Me hice el dormido durante algunas horas y espere con paciencia a que caiga completamente dormido a mi lado.

Tengo que hacerme cargo de mis problemas y no importa cuando desee quedarme durmiendo entre sus brazos es algo que definitivamente no puedo hacer, jamás me lo perdonaría.

Con delicadeza y lentitud logro safarme de su agarre y enseguida me reemplazo por una de mis almohadas que vuelve a abrazar con fuerza.

Me paro de la cama, me visto con tranquilidad, observo el celular sobre mi cama y decido programar algunos mensajes para que se envíen cuando yo ya este en Busan, tal vez muerto, tal vez a punto de morir.

Observo el rostro tranquilo de Jungkook durmiendo plácidamente, sonrío una vez más gracias a él, me acerco y dejo un beso en su frente, esa es mi despedida y se que la va a ver en cuanto revise las cámaras al notar que me fui.

Bajo al piso principal de la casa de Jungkook y me dirijo a su oficina listo para irme de ahí con ayuda de VON.

—VON.

"Si, señor Park"

—Quiero que desactives el sistema de seguridad y cuando veas que abandono la casa vuelvas a activarlo.

"Entendido, señor Park"

—No le avises a Jungkook que me voy.

"Entendido, señor Park"

Es es todo lo que necesito, salgo de la oficina observando como el sistema de seguridad se desactiva tal y como ordene, entro en el garage, y elijo ese llamativo Lamborghini rojo en el que me llevo a nuestra primer cita, aunque sea en las cuatro horas de viaje que tengo por delante voy a dedicarme a pensar en él.

Me subo en el auto, lo enciendo y salgo de ahí manejando tal y como el abuelo Song me enseño cuando estuvimos viajando por diferentes países en busca de Sungwoon.

Todos están muertos y no quiero que alguien más muera, si yo puedo ponerle fin a todo...entonces eso es exactamente lo que voy a hacer.

(...)

Ese lugar al que me prometí jamas en vida volver por voluntad propia se encuentra justo frente de mi, me bajo del llamativo auto rojo y camino hacía el gran portón cerrado de la enorme mansión, esta es la base principal de ellos y es donde Reyna se encuentra.

"Realmente te mandaron a morir"

La voz de Sungwoon llega a mis oídos, se esta burlando de mi y la verdad no me importa ni un poco.

—Solta a Hoseok y entro por mi cuenta.

"Sus deseos son ordenes"

En ese instante las puertas de la gran mansión se abren junto al gran portón frente a mi, de inmediato soy capaz de reconocer a Hoseok, su traje gris claro completamente ensangrentado, esta lejos de mi y aún así puedo ver que le cuesta caminar y su rostro fue completamente golpeado, siento la sangre hervir en mis venas y Sungwoon parece notar eso.

"Disculpame, estaba un poco aburrido, pero deberías agradecer que no le falta ninguna extremidad, fui bueno porque sabía que ibas a venir a mi, Jimin, siempre acabas viniendo a mi"