Las consecuencias

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Cuando Sana tuvo que hacer la mudanza ni Momo ni yo estábamos, ambas teníamos cosas en agenda. Cuando llego la hora de cenar ambas nos encontramos en la entrada del apartamento. Momo tenia en su mano una bolsa de comida y sin mucho preámbulo nos preparamos para cenar y después de un día de trabajo cansado solo queríamos ver la televisión un rato y cuando intentamos encenderla no encendió.

—¿Será que le cayo agua?—pregunte desconcertada y me levante a darle unas palmaditas. No recordaba que le haya caído agua.

—¿No es aprueba de agua?—dijo Momo como si la televisión estuviera destinada a conectarla a la par de una piscina

—No, obvio no—dije al reir

—Solo hablemos porque la comida se enfriara—dijo ella

Me sente a comer a su lado y me sonrió pícaramente.

—Entonces ¿Es Sana tu novia?

—¡No! Hay muchas cosas que pensar, no te negare que siento cosas por ella pero... no sé es complicado

—¿Enserio? No parece. Siempre estas al pendiente de ella y permites que te abrase, buscas cualquier excusa para estar con ella y se acueste en tu hombro, te de de comer en la boca e inclusive siempre que puedes estas tomando su mano

—Eso no significa que sea mi novia

—¿A no? Entonces eso significa que ella pueda hacer eso con alguien más

—¡No! Claro que no, es solo que... estoy asustada—dije con miedo de profundizar más esta conversación

—Puedes decirme lo que sea, no te juzgare—dijo al sonreírme

—No puedo dejar de pensar en ella, todo me recuerda ella y cuando la miro siento una necesidad inconsciente de sonreírle y eso me asusta porque tengo miedo de lo mucho que puedo quererla y lo mucho que puedo perder si alguna vez la llego a llamar mi novia

—¿No crees que ya estas perdiendo algo al no permitirte quererla como es debido—dijo mientras dejaba de comer y me miraba seria

—¿Qué crees que dirán mis padres? ¿Y si la gente se da cuenta y arruinamos todo?

—Si eso llega a pasar, todas vamos a estar para ti, bueno para las 2—dijo al tomar mi mano

Había estado reprimiendo tanto este sentimiento de duda y culpa por sentirme así que con esta pequeña conversación comencé a llorar. Lloraba de preocupación porque tenia mucho miedo de lo que pasaría, porque no quería perder nada sin embargo estaba claro que algo perdería, ya sea a ella, mis padres o mi carrera, sería demasiado bueno que no perdiera nada.

—Llora esta bien—Momo me abrazo con uno de sus brazos y comenzó a comerse la carne de mi plato, reí por su cinismo sin embargo me sentí reconfortada.

Sana entró al departamento con su vieja llave y me vio llorar, intenté esconderlo pero era demasiado evidente. Ella se acercó a mí, se sentó a mí lado y como si supiera porque lloraba acaricio mi cabeza.

Después y para siempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora