An Inconvenient Path

Reconstruyendo la confianza

Voldemort no dice nada. Saca su varita, los limpia a ambos y luego acomoda su propia túnica en su lugar. Cuando Severus tira de sus brazos de nuevo, se liberan de su túnica y Severus busca su varita.

No lo ve por ningún lado. Con una leve sonrisa, Voldemort extiende una mano y le ofrece a Severus su propia varita.

Severus toma la varita. No puede creer que no se dio cuenta de que Voldemort se lo había robado. Ese bastardo astuto.

Voldemort se ríe.

"Creo que Lucius quiere hablar contigo. ¿Le hago saber que estás libre ahora?"

Severus no tiene muchas ganas de hablar con Lucius, pero supone que realmente no puede evitarlo. Le da a Voldemort un asentimiento de mala gana, cuidadosamente colocando su túnica en su lugar.

Sin otra palabra, ni ningún reconocimiento de que acaban de tener un sexo espectacular, Voldemort se levanta y sale de la habitación.

Poco después, entra Lucius.

Lucius se acerca para pararse sobre Severus. El hombre está impecable. Ni un mechón de su sedoso cabello rubio está fuera de lugar. Sus túnicas son elegantes y lujosas; sus zapatos perfectamente lustrados. Su rostro es suave y sin arrugas y parece unos cinco años más joven de lo que realmente es.

Los labios de Lucius se curvan.

Severus probablemente luce un poco desordenado. Se imagina que es increíblemente obvio que acaba de tener sexo con Voldemort.

"Tienes que estar bromeando", dice Lucius con su acento lento y frío. "Catorce años, y esto es lo que vales".

"¿Se suponía que debía decirle 'no'?" grita Severus, poniéndose de pie. Esa es una línea mucho más fácil que contemplar, mucho menos hablar de, la ternura y el afecto inesperados que sintió cuando Voldemort expresó interés en Severus.

"¿Como me has dicho durante tanto tiempo?" pregunta Lucio.

Lucius quiso a Severus durante mucho tiempo, incluso después de que terminó la guerra, pero Severus nunca tuvo ningún interés después de su relación con Evan. Severus puede ver que Lucius está realmente herido por esto.

Maldición.

"¿Qué quería? Además de sexo", agrega Lucius, su labio se curva de nuevo.

"Él quería el—" Y Severus se ahoga, y no puede continuar. No puede respirar, entra en pánico por un segundo. Luego cierra los ojos y, muy deliberadamente, cambia de opinión sobre lo que iba a decir.

Cuando Severus puede respirar de nuevo, abre los ojos para ver a Lucius luciendo tormentoso.

"Quería el diario", termina Lucius por él. "Aunque dijiste que no lo dirías", sisea. Está claro que ha traído el tema con el propósito de gritarle a Severus. Sus manos vuelan y agarran la parte delantera de la túnica de Severus como si fuera a amenazarlo físicamente.

Severus no reacciona, aparte de levantar una ceja sardónica. " Él te dictó esa carta, Lucius. Ya lo sabía."

El rostro de Lucius se vuelve aún más pálido, lo cual es todo un logro. "Él... ¿has sabido que ha estado vivo durante tres años?"

"Cuatro," corrige Severus distraídamente. "¿Quién crees que lo trajo de vuelta? ¿ Colagusano ?" Severus agrega burlonamente.

Lucius se sonroja, su rostro cambia rápidamente de blanco a rojo. Suelta la túnica de Severus, pareciendo avergonzado. "No puedo creer, no puedo creer que no me lo dijeras", dice débilmente. "Pensé: estábamos fingiendo no ser amigos, no es que en realidad fuera así".