Ashley enmudeció al verle allí.
El chico apretaba los puños a cada lado de su cuerpo, como si estuviera conteniéndose para no darle un puñetazo a algo. O a alguien.
"¿Qué haces aquí?" preguntó, fusilando a Ash con la mirada. No paraba de encontrarse con ella por todos lados y ya estaba harto.
Ella seguía sin decir nada, como si de repente hubiera olvidado cómo hablar.
"¿Ahora además de idiota también eres sorda?" le gruñó, dando un paso hacia Ash, quien ya estaba comenzando a temblar de nuevo "Mírame cuando te hablo" demandó, al ver cómo ella miraba al suelo "Te he preguntado qué estás haciendo aquí. ¿Me estás siguiendo?"
Aquello sí que hizo que la chica reaccionara. ¿Seguirle?
"¿De verdad piensas que te seguiría, Justin?" habló ella, con voz tranquila, como si no estuviera sufriendo un ataque de nervios allí mismo al tenerle tan cerca...y sin camiseta "Veo que tienes un ego muy grande, pero no te lo creas tanto. Tengo mejores cosas que hacer que seguirte"
"Sigues sin responder mi pregunta" le dijo él, dando otro paso hacia Ash, quien se encogió ligeramente como un animalillo asustado. Justin lo notó, por lo que le dedicó una sonrisa no muy amigable "Deja de temblar. No te voy a comer"
"No estoy temblando, idiota. Y no, no te estoy siguiendo" aseguró ella, lamiéndose el labio inferior en un gesto nervioso que captó la atención del muchacho "He venido con Zoe a hacer ejercicio. Por si no lo sabías, para eso sirven los gimnasios"
Él soltó una risa, irónica, por supuesto, pero que hizo que Ash se quedara congelada durante una fracción de segundo.
Tenía una risa bonita, para qué mentir.
"¿Por qué será que no te creo?" le preguntó él, dando un paso más hacia ella, quedando a escasos centímetros de su cuerpo.
Justin mantenía esa preciosa pero molesta sonrisa burlona en su rostro, provocando que Ash sintiera un calorcito por todo su cuerpo.
Esas sonrisas deberían estar prohibidas. Jamás había visto a Justin sonreír, y sin duda, lo hacía aún más atractivo que de costumbre.
Por otro lado, le daban ganas de borrarle la sonrisa de superioridad de una bofetada. Odiaba cuando la gente la miraba con superioridad, como si ella fuera un simple bicho.
Sin embargo, Ash sabía que lo de las bofetadas no acabaría bien, así que, ¿por qué no darle al chico su propia medicina?
"¿Será porque eres un idiota sin cerebro y engreído?" le habló ella, imitando la sonrisa del chico.
Esto tan sólo hizo que Justin ensanchara aún más su sonrisa, negando con su cabeza y dando un paso más hacia Ash.
Esta retrocedió, porque de lo contrario, ellos hubieran estado prácticamente pegados.
"No, esa eres tú" contestó él, con la voz calmada, pero con millones de emociones explosivas escondidas bajo su mirada burlona "Perdona que sea yo quien te lo diga, pero si alguien de los dos es un sin cerebro, sin duda eres tú"
Ash se quedó medio adormecida por el frustrante calor que comenzaba a sentir en todo su cuerpo, tanto de ira como de... en fin, otra cosa.
"¿Te ha comido la lengua el gato, Ashley?" siguió provocándola él, acercándose más.
Ashley sintió que aquel último comentario hizo que saliera de su propia ensoñación de inmediato.
Aquellas abdominales tan marcadas, el pecho tatuado del chico y su mirada la estaban distrayendo. La estaban haciendo quedar como una idiota.
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Used to ~Jb~
FanfictionNunca hubiera imaginado que te fijarías en alguien como yo. Tú podrías tener a cualquier chico que quisieras al alcance de tu mano, ¿por qué me elegiste a mí, Ashley?