Parte 19

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Ashley bajó del bus, haciendo un esfuerzo por aparentar normalidad y no dejar que se notara que estaba casi histérica.

Miró de nuevo la ubicación que le había mandado Justin por WhatsApp, asegurándose de que estaba en la calle correcta. Miró a su alrededor.

La calle parecía ser correcta. Estaba repleta de casas similares a la de Ashley, tal vez algo más pequeñas. Las casas eran de color marrón, como si estuvieran hechas de madera. Había coches aparcados a ambos lados de la calle y grandes árboles con hojas naranjas daban un aire reservado al lugar.

Se paseó por la calle, buscando la casa número 11, tratando de no atragantarse de los nervios al saber que era Justin quien la estaba esperando en esa casa.

Además, ¿estaría su familia allí? ¿Qué les diría? ¿Y cómo debía presentarse? Justin y ella no eran novios.

Sintió que comenzaban a sudarle las manos, a pesar de que hacía un frío importante en la calle. Cuando pasó frente a una casa que tenía el número 11 pintado en la puerta, se detuvo un par de instantes.

Trató de respirar con profundidad para calmarse. Se secó las manos disimuladamente en sus jeans. Pasaron un par de segundos antes de que se animara a caminar hacia la puerta de la casa.

Justin pegó un pequeño brinco en el sofá cuando oyó el timbre, y tuvo que controlarse para no ir corriendo a abrir como un desesperado.

Caminó hacia la puerta y trató de no parecer demasiado nervioso mientras abría la puerta. Y allí, frente a él, estaba Ashley.

Justin la observó, sintiéndose extraño al saber que ella estaba en su casa, en su entorno. No podía dejar de sorprenderse ante la rapidez con la que se estaba abriendo a ella. A excepción de algunas cosas.

"Hola, Justin" susurró ella, sin poder evitar sonreír al verle allí, frente a ella, vestido todo de negro y contrastando graciosamente con la puerta a sus espaldas, que era toda blanca.

"Hey" la saludó, dando un paso hacia ella. Sin pararse a pensar en nada, tomó una de sus manos, gesto que le hizo darse cuenta de que su piel estaba congelada "Ashley, estás muy fría. Vamos, pasa. No quiero que te congeles"

Sonrió internamente ante el gesto de él, mientras pasaba dentro de la casa con Justin, quien cerró la puerta a sus espaldas.

Observó con curiosidad el salón de la casa, fijándose en todo el aspecto minimalista pero acogedor que tenía, casi todo pintado de colores claros. Ash estuvo segura de que no era Justin quien había elegido la decoración.

Se paseó por el salón, fijándose en todos los bonitos detalles que le daban un aire informal al lugar. Y, sobre todo, fijándose en un detalle importante : estaban solos en casa.

Justin la miró con ternura, y sin poder aguantarse más, caminó sobre sus botas hacia ella, pasando sus brazos por su cintura. Tiró de ella suavemente hacia atrás, para colocarla contra su pecho.

"Bonita casa" sonrió ella, subiendo su cabeza para mirarle. Y Justin pudo ver cómo se sonrojaba, cuando le dijo "Así que, ¿e-estamos solos?"

Él asintió, acariciándole el costado por encima de la sudadera gris que se había puesto.

"Estamos solos" susurró contra su pelo, dejando un pequeño beso en su cabeza. Luego le dio la vuelta en sus brazos para que estuvieran cara a cara "Nada de ruborizarse, muñeca. Se supone que vamos a hacer un proyecto, no hay nada de emocionante en eso, ¿verdad?"

Ella no pudo evitar reír, cosa que hizo que él sonriera un poco.

"Claro, nada de ruborizarse" asintió ella "Entonces, ¿dónde vamos a hacer el trabajo?"

Used to  ~Jb~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora