Used to ~Jb~

Parte 46

Tan pronto como llegaron a la habitación y encendieron las luces, Ash se apresuró a cerrar la puerta.

Tenía las mejillas ardiendo, pues sabía lo que iba a pasar. Puso el cerrojo de la puerta. Se giró de nuevo hacia la habitación cuando vio a Justin a escasos centímetros de ella.

"Será mejor que cierres con llave, muñeca" le comentó él, con una sonrisa ladeada en su bonito rostro.

"¿Por qué lo dices, Justin?" le devolvió el gesto, apoyándose contra la puerta que acababa de cerrar. Le hizo un gesto con la mano para que se acercara.

Sonrió cuando, en cuestión de segundos, Justin ya se había aproximado a ella. Cubriendo el cuerpo de Ash con el suyo. Haciéndola retroceder hasta que su espalda estaba completamente pegada contra la puerta.

La miró, sin poder evitar dirigir sus ojos hacia el cuerpo de su chica. En cuanto volvió a mirarla a los ojos, ella se estremeció. Justin apoyó un brazo contra la puerta, junto a la cabeza de Ashley.

"Porque hay muchas cosas que me gustaría hacerte ahora mismo" fue la respuesta de Justin. Ash sintió de inmediato un cosquilleo en su sexo al oír aquello de la boca del rubio "Y no me gustaría que nos interrumpieran, muñeca"

Ella dio un pequeño respingo cuando los labios de Justin fueron directamente a por su cuello. A pesar de lo frías que tenía las manos cuando la agarró de la cadera para acercarla a él, su boca seguía tremendamente cálida. Hundió la cabeza en el cuello de Ash, comenzando a dejar besos por toda su piel.

Ash ahogó un grito cuando la lengua de Justin lamió su cuello, haciendo que tuviera un escalofrío.

"Nada de gritos" le advirtió él, con una mirada que no hizo sino excitar más a la chica.

Ella asintió, pero tuvo que morderse el labio para no gritar cuando una de las manos de él se coló por dentro de sus leggins. No tuvo tiempo de procesar todo aquel placer cuando de repente él la tocó allí abajo.

Sus dedos la tocaron ligeramente, apenas rozándola. El muchacho sonrió contra su cuello cuando Ash le pidió más. Joder, le encantaba tener ese control sobre su cuerpo, saber que Ashley le necesitaba casi tanto como Justin la necesitaba a ella.

Ash echó la cabeza hacia atrás cuando él finalmente la penetró con uno de sus dedos, sin ni siquiera haberse molestado en bajarle los pantalones o las braguitas. La torturó a un ritmo suave y lento, queriendo ver cómo ella se mordía el labio de placer.

Cuando él retiró su dedo súbitamente, Ash necesitó unos segundos para entender qué había pasado. Por qué había dejado de sentir ese placer.

"Justin" gimoteó ella al ver la cruel sonrisa del muchacho contra su escote, quien estaba disfrutando de torturarla.

Estaba completamente empapada, y no se veía capaz de quedarse en ese estado. Necesitaba más.

"¿Sí?" él encaró una ceja "Dime, Ash, ¿qué necesitas?" le preguntó, necesitando oírla decírselo por su propia boca.

"Tócame" le pidió, esperando que las paredes no fueran demasiado delgadas. No le apetecía que el resto de huéspedes la escucharan.

El chico sonrió, levantando una de su manos y llevándola hacia la clavícula de Ashley.

"¿Aquí, mi amor?" le preguntó con evidente diversión. Ash se derritió ante aquel apelativo tan poco común en él.

Haciendo acopio de su valentía, tomó la mano de Justin y la coló por dentro de sus pantalones y sus braguitas. Colocándola justo donde lo necesitaba.