Rick Grimes~One Shots

33- Rick, Rosita x lectora

⚠️INFORMACIÓN IMPORTANTE AL FINAL DEL ONE SHOT POR FAVOR LEER⚠️

Rick estaba caminando por Alexandria haciendo guardia y patrullando las calles, era su trabajo como nuevo sheriff. Yo en cambio me encontraba charlando con Maggie y Rosita, contando chismes y hablando sobre lo afortunados que eran estás personas por estar en este increíble lugar donde podrían reconstruir sus vidas mientras toda la masacre y sufrimiento pasaba fuera de los muros.

-¿Cómo te va con Rick? Los escuché pelear anoche.-Maggie pregunto de la nada haciendo que recordara nuestra pelea de anoche, y obvio que el coreano y la castaña oyeron todo ya que vivían al lado.

-Si, peleamos anoche. Algo le sucede y no quiere decírmelo.-Mire hacia la calle donde el se encontraba.

-Habla con el.-Rosita también lo miro, volvió a mirarme y note como se mordía el labio inferior.

-¿Crees que no lo intente? No quiere hablar conmigo, y me enfurece por qué está distante y raro, tengo miedo de que me termine.

-Imposible. El te ama.-Ro hablo con toda la seguridad del mundo como si supiera lo que le sucedía a mí novio.

-No lo sé, últimamente lo veo raro conmigo. Cómo si no quisiera tocarme.-Desvie la mirada de mí novio y me enfoque en mí amiga.

-Habla con el, pídele que hable contigo, dile que estás preocupada.-Maggie posó su mano en mí hombro tratando de tranquilizarme

-Y si no funciona échate a llorar o algo por el estilo.-Rosita río provocando que las tres lo hiciéramos.

-Esta bien, iré a hablar con el, no aguanto más que estemos distanciados.

-Ve.-Maggie me regaló uno de sus cálidos abrazos.

-________...

-¿Si?-Me separó del abrazo de Maggie y miro fijo a los ojos a Ro.

-¿Pase lo que pase seguiremos siendo amigas no?-Rosita miro hacia el suelo nerviosa.

-¿De qué hablas?

-Sabes a lo que me refiero.-La latina me miró de arriba a abajo y abriendo un poco los ojos cuando llego a los mios, como dándome una especie de señal.

Entendí inmediatamente y sonreí tímidamente.

-Lo hablamos después, Ro, sabes lo que opino, pero no se puede, y sabes por qué.-Mire a Rick y luego a Rosita.

Seguí mí camino en dirección a Rick, el me vio ir en su dirección, me miraba, solo me miraba.

-Hola...

-Hola.

Que incómodo maldita sea.

-¿Qué pasa?-Solto el sacando la incomodidad del ambiente.

-¿Por qué no querés decirme lo que te pasa, Rick? Te extraño.-Intente acercarme a él para abrazarlo pero este se aparto.

-Lo se todo.-Fruncio el seño y miro un poco hacia abajo por la diferencia de altura.

-No te entiendo.

-Tu y Rosita.

Mí cara se volvió roja de la vergüenza y el nerviosismo. Dios mio lo sabía, el sabía, ¿Como carajos lo sabía? Mis manos sudaban, flaqueo ante su mirada intimidante y para no comenzar a tener un ataque de ansiedad y enterrarme mis unas en el cuello decido hablar rompiendo el nudo que se me había formado en la garganta.

-¿Sabes que cosa?—El nerviosismo me gana y me muerdo las uñas.

-Que se besaron, antes de llegar aquí y hace unos días. Ella me lo dijo todo hace hace dos días.