- Gracias por venir. - le dijo la chica mientras sollozaba al borde de su cama. -
- Para eso estoy, - contestó rápidamente el joven que prefería esconderse tras una máscara de gas. - siempre que pueda ayudarte, te ayudaré, - le repitió como siempre. - pero, en serio deberías de buscar ayuda, Cecilia, - le pidió, ya habia perdido la cuenta de la tantas veces que escapó de su habitación para ir a verla por sus constantes llamadas telefónicas. - algún día yo no estaré cerca y no podre ayudarte. - dijo recordando que este era su último año escolar y que pronto ambos podían tomar rumbos separados. -
Sin embargo nunca pensó que estarían tan lejanos.
- Pero, mientras eso pasa tu estarás para mi. - logró decirle tratando de cesar su llanto. -
"Pronto te tendré conmigo - pensó la pelirrosada sentada a la orilla de su cama de la misma manera de hace años en la escuela con la única diferencia que ahora estaba sola. - y nunca más tendré que tomar estas pastillas y fingir para poder ser libre por que tú harás todo por mi como lo hacías antes"
La chica se encontraba desesperada, estaba drogada, se sentia el cuerpo pesado y podía jurar que caminar le mareaba.
La nueva medicina que estaban usando en ella era muy fuerte, los efectos secundarios que le daban la tenían demacrada.
Si había mejorado sus ataques de pánico pero, realmente no tenía ánimos de nada, sus problemas emocionales estaban todos en fila como autos en frente de un semáforo rojo, solo esperando luz verde para arrancar a máxima velocidad.
"¿Como te has sentido hoy?"
"Te veo tranquila"
Esas frases del psiquiatra la tenían asteada y esa jodido medicamento la tenia tonta, no podia pensar bien aunque quisiera.
Todo parecía pasar tan lento.
Tenia que ver como evitar el medicamento pero, ya habia intentado de todo, hacerse la enferma, vomitar, esconder la pastilla debajo de la lengua, en fin, muchas cosas pero, todo eso le jugo en contra por que ahora dos enfermeros estaban encima de ella a la hora de las medicinas y la forzaban a tomarse esa pastilla a la fuerza como si fuera una niña pequeña que ni siquiera puede abrir su boca.
Habia aguantado tanto por que, uno, no le quedaba de otra, dos, tenia que comprobar si su plan realmente podía funcionar y eso la forzaba a portarse lo mejor posible (aunque debía admitir que en ocasiones no podia por la desesperación de volver a estar tan drogada), tercero y último, sabia que Flug tarde o temprano podía visitarla, y eso ayudaría si su plan no iba a ningún lado.
"Por favor ven, ya no aguanto más, sálvame" - pensó sabiendo perfectamente que ese grito de ayuda no sería escuchado por absolutamente nadie. -
Momentos como estos se imaginaba como seria todo si nunca hubiera aceptado todo lo que le ofreció Goldheart, si ella realmente hubiera dado un esfuerzo mínimo en sus clases y hubiera terminado, no con honores pero, por lo menos haber terminado la escuela de villanos.
Ahorita estaría libre, haciendo lo que quisiera y posiblemente seguiría siendo amada de alguna manera, igual tendría popularidad.
- Hora de la medicina. - sono la voz que ella menos quería escuchar en ese momento sacándola de su sueño diurno. -
No pudo evitar soltar un quejido al escuchar eso, no era exactamente uno de dolor como cuando físicamente te hieres sino, uno de hasteo, casi como de aburrimiento, algo parecido a decir ugh con todo el sentimiento posible.
Sin decir nada se puso de pie alejándose de su cama de donde estaba sentada.
- Que bien que estas cooperativa. - dijo uno de los dos fortachones hombres que venían diariamente por ella a la misma hora por la misma razón. -
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Sin Tiempo | Demenflug x Paperheed
FanfictionDespués de que los subordinados de Black Hat dejarán a la luz lo que en verdad era la heroína Miss Heed y sus intenciones para finalmente dejarla internada en un sanatorio. El científico tuvo varios conflictos mentales sobre lo sucedido haciendo ap...