DESTINO ENREDADO.

418 42 3
                                    

-Me voy, Señor Stark- murmuró el joven rubio, mientras de una mano a otra,  se pasaba nervioso un ramo de rosas blancas- ¿Podría... podría decirle a Peter que me llame cuando llegue... podría darle estas flores?

-Claro, Harry... lamento que Pett no esté en casa, seguro hay una buena explicación.

-Puede ser que yo confundiera el día de nuestra cita, o que él lo olvidara, tal vez encontró algo más importante que hacer. En fin... gracias, espero no haber sido una molestia.

-Cuando gustes venir- respondió Tony, tomando el ramo y notando la molestia del joven Osborne- Aunque no creo que te queden muchas ganas...- agregó después, por lo bajo y sonriendo mientras hacía una señal de adiós con su diestra en alto.

Tony miró las flores sin saber que hacer con ellas, suspiró y ahogó el impulso de ponerse la armadura y salir en busca de su inquieto hijo. Pero tenía un compromiso con Thor y con Loki, sin él,  no podrían continuar examinando los sueños de Ari. Supo que su preocupación tenía que esperar.

-Si tú quieres, yo las pondré en la habitación de Peter, así las verá apenas llegue.

-Gracias, doctora Foster- respondió a Jane, que atestiguó el incómodo momento- Creo es lo más prudente.

-Todos los adolescentes tienen estas etapas de rebeldía, Peter es un buen chico.

-Peter es un estupendo chico, inteligente, lleno de valor...- replicó Stark, animando su voz y el brillo de sus ojos de avellana al hablar de su pequeña arañita- Sus poderes lo convertirán en un gran héroe, en el mejor de los Vengadores, y su mente es mejor... bueno, no exageremos, es casi tan genial como la mía...

-Veo que está en tu corazón.

-Muy dentro de mi corazón... y de Rogers también, por eso nuestra separación lo afecta tanto. Si al menos aceptaran reunirnos y firmar todos los documentos, y finalizar la adopción sin pelear.

-Yo no soy buena en esto de los hijos, pero intentaré hablar con él... de momento, te agradezco que me permitas usar uno de tus laboratorios, así actualizo mis trabajos pendientes, que abandoné pensando que no regresaría de Asgard.

Tony extendió el brazo para invitarla a entrar y usar sus equipos. Enseguida se dirigió directamente a la sala y cambió su semblante pensativo por su habitual aire del que tiene todo bajo control, incluyendo sus emociones.

-¿Estás listo,  Loki? Ponte la diadema sensorial... esta vez tiene que funcionar.

Ari parecía permanecer sin cambios, pero el registro de sus ondas cerebrales indicaban que pasaba al sueño REM, sus párpados temblaron ligeramente y su pequeño cuerpo se estremeció.

-¿Eso es normal?- preguntó Thor, alarmado.

-La sedación disminuyó un poco, por eso el niño está más reactivo... según los cálculos de Tony, es necesario para lograr sincronizar su sonda... ahora,  Loki, concéntrate... separaré tu forma astral de tu cuerpo y podrás ingresar al sueño de tu hijo...

Loki asintió, colocó sobre su frente un aro metálico con una piedra opalescente en el centro. Cerró sus ojos y pareció entrar en trance. Strange lo tocó con firmeza en medio del pecho y el pelinegro se desvaneció. Thor brincó en su lugar,  pero  Stephen lo detuvo con un ademán, habían pasado ya dos semanas de intentos infructuosos y era este, el primero en el que Loki lograba, aparentemente, encontrar el portal al mundo onírico.

-Cuídate...- murmuró el rubio, observando los monitores y demostrando que comprendía mucho más la magia que la tecnología al entrelazar sus manos con la mano desvanecida de Loki y comenzar a orar, invocando a Frigga, su madre, Diosa de la familia- Cuida a nuestro niño...

EN DEFENSA DEL AMOR.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora