El Chat de Marinette

10. Cosplay

Día 10

Cosplay

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Marinette observaba a Chat Noir que la miraba realmente risueño, mostrándole una mochila que, con solo verla, daba la sensación de que venía cargada de cosas. No entendía que planeaba el gato, pero, aun así, obedeció y se sentó en el diván.

—¿Confías en mí? —le dijo, parándose detrás de ella— ¡Esa duda! —exclamó al no obtener respuesta— ¡Rompiste mi corazón, Marinette!

Aquella frase la hizo sobresaltar y él lo notó, poniendo sus manos en los hombros de la chica— ¿Estás bien?

—Sí —dijo, mirándolo por encima del hombro, y luego la mano que tenía en su hombro—, mientras sea oscuro, estoy bien...

Chat Noir la miró sin entender nada, pero sacudió la cabeza y decidido que iba a retomar a lo que vino y de paso, distraerla.

—Voy a soltarte el cabello —le indicó— cierra los ojos por favor.

Marinette obedeció y cerró los ojos, y quizás, por esa razón, la presencia de su amigo se hizo más notoria, podía escucharlo tararear, podía sentirlo trabajar en su cabello con una peineta que cepillaba tan suavecito que Marinette empezó a adormecerse.

Sintió que tomaba parte de su cabello y lo amoldaba con un spray, que imaginó que era fijador. Luego, sintió que su cabeza y parte de la frente era cubierta por un gorro, levantó su mano derecha para tocarlo, pero solo recibió un pequeño golpecito del chico.

—No, no, aun no —respondió. Ella suspiró y se quedó esperando que terminara.

—¿Ya puedo abrir los ojos?

—Dame un segundo —dijo, moviéndose frente a ella, acomodando sus mechones de pelo—. ¡Ya puedes abrirlo! —y en cuanto Marinette abrió los ojos, éste soltó un grito ahogado.

—¿Qué te pasa?

—¡Yo sabía! —dijo, chasqueando los dedos.

—¿Qué sabías? —en eso, Marinette observó su look, Chat Noir le había hecho media coleta, por lo que parte de su cabello estaba suelto, tenía un gorro de lana blanco y unas hebillas doradas en los dos mechones de cabellos que cubrían su rostro. Marinette no tardó en identificar a lo que se refería.

—¿Hikari? ¿En serio?

—Es que... —Chat Noir aún se cubría la boca con su puño—... empecé el Legend Arceus y cuando vi a la prota fue como... ¡Eres igual! Una fotocopia —Marinette lo observó confundida, pues realmente lucía emocionado.

—¿Te sientes bien?

—Soy un HikaFan, perdóname —dijo, moviendo su mano como si buscara calmar las lágrimas, que obviamente no tenía—. Y verte peinada como ella, solo hace que mi corazón se aceleré.

—O sea que si al peinado, le agrego el vestuario y hago cosplay de ella, ¿te mataría?

—¿De felicidad? —preguntó, con tan energía, que Marinette solo pudo negar con la cabeza—. Por supuesto.

—Ya, dame —le dijo, sospechando que el chico no había traído solo la gorra del personaje de Pokémon, sino que también había traído la ropa.

Chat Noir le pasó la mochila con una sonrisa que no se la quitaba nadie, y salió hacia el balcón a darle tiempo para que se lo pusiera.

Y efectivamente, dentro de la mochila, en una bolsa blanca, estaba el chaleco negro, la falda rosada, el pañuelo rosado y las botas rosas. Negó con la cabeza, mientras se colocaba cada prenda y luego se miró al espejo.

Chat Noir no mentía. Conocía al personaje por los juegos de Diamante y Perla que había estado jugando en su consola y sabía que tenían cierta similitud con ella, pero ahora que se veía disfrazada...

Si iba a alguna convención de Anime, estaba segura que ganaría con el mínimo esfuerzo, realmente se parecía mucho.

Llamó a Chat Noir cuando estuvo lista y el chico no pudo evitar sacar su vara para sacarle mil y una foto a su compañera.

—¿Sabes que me has hecho el gato más feliz del universo?

Marinette lo observó y le sonrió.

—Me lo puedo imaginar, Kitty, me lo puedo imaginar.

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Es que quizás algunos de ustedes no sepan, pero es que, si ponen "Dawn pokémon" o "Hikari Pokémon" en Google, esa pokegirl es muy parecida a Marinette.

El cabello azulado con mechones en la cara, los ojos azules, ambas son las chicas de rosa... No podía desaprovechar la oportunidad.

¡Tenía que hacerlo!

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¡Gracias a todos por leer!

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¡Saludos!

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10 de Mayo 2022