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Emma

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Emma.

Camino por la gran entrada de el hospital Grace de Seattle hasta llegar a la recepción. No tiene ni 5 horas que baje del avión, localicé un buen hotel donde hospedarme en lo que consigo un lindo departamento para vivir, dejé mi equipaje en el cuarto y salí a conocer mi próximo lugar de trabajo.

Visualizo a una linda enfermera y me acerco a ella-Buenas tardes, disculpe, ¿me podría indicar cómo llegar a la oficina del dr. Webber?- digo, recargando mi cara en mi mano esperando una respuesta.

-Claro, debe sub...- dice sin alzar la mirada hasta que alguien a mis espaldas la interrumpe.

-Emma Shepherd, pensé que te vería mañana por la mañana- exclama Richard.

Doy la vuelta para encararlo- Richard, quise venir a ver mi nuevo lugar de trabajo y ya sabes, mi departamento- le comento, comenzando a caminar hasta un ascensor para subir al departamento de cardiología.

Entramos al ascensor y aprieta el botón con el piso correspondiente- ¿Y cómo está Derek?, le ofrecí un puesto para jefe de neurología y me dijo que lo platicaría con Addison- me comenta Richard.

Suelto un suspiro cansado de que siempre hablen de mi hermano- Pues... creo yo que esta bien, no me comentó que le habías ofrecido un puesto y no creo que se lo haya dicho a Addison, ella me lo hubiera dicho.- le dije, para después salir del ascensor y observar mi nueva área de trabajo.

Richard sonrió abiertamente al observar mi reacción al ver el piso de cardiología. -Bueno Emma, ya que estás familiarizada con el hospital, puedes regresar a tu cuarto de hotel y organizarte, mañana por la mañana comienzas a trabajar, también podrás realizar operaciones de neurología, ya que me falta personal, ¿está bien?-

Estoy 100% segura que mis ojos brillan de la emoción al saber que podré ejercer mis dos especialidades en este gran hospital.- Muchas gracias Richard, por ofrecerme esta gran oportunidad- le doy mi sonrisa más grande y lo abrazo.

Richard corresponde mi abrazo, para mi, Richard es como un padre, siempre me apoyo a mi como a Derek-Emma, recuerda que en dos días llegan los nuevos internos- dice, después de soltarme, caminamos hacia el ascensor a la entrada del hospital.

-No se me olvida, acuérdate que a parte de ser buena cirujana cardio torácica y neuróloga soy buena maestra- le guiño un ojo, jugando.

-Claro, claro- dice en un tono burlón.

-Bueno, me voy a mi hotel, dale mis saludos a Adele, dile que quiero tomarme un café con ella, la extraño mucho- le digo, me despido de un beso en la mejilla para luego darme la vuelta y dirigirme a mi cuarto de hotel, me puse una pijama y me fui a dormir.

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The other Shepherd. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora