Capitulo 6

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"Siento a los restos, irse en un instante, en un abrir y cerrar de ojos, sin decir adiós. Tenía una noción profunda como el océano, azul como el cielo, oh mi. Si hubiese sabido, si hubiese sabido. Si hubiese sabido que podrías haber sido tú, si tuviera la oportunidad..." Been You || Justin Bieber  


La noche era cálida a pesar de los nubarrones cubriendo los cielos y el viento meneando levemente los árboles. Hacía más de 5 horas que había anochecido y Harry no lograba conciliar el sueño, sus pensamientos estaban atestados de imágenes de Louis, pues aún no asimilaba bien lo que había pasado esa tarde.

Niall dormía plácidamente a su lado, roncando suavemente. Harry quiso salir y buscar a Louis, pero sabía que era una mala idea ... ¿Habían sido imaginaciones suyas?  

Por primera vez en su vida, el rizado comenzaba a dudar seriamente en sus preferencias sexuales. Louis le hacía dudar, y ni siquiera estaba seguro de que fuese real, porque digamos; personas con astas no hay, tan hermosos como Louis lo era... mucho menos, ojos de color azul rey... imposible. Y es que sólo habían pasado unas horas de haberlo conocido ¿y ya se cuestionaba eso? ¡Joder!

Se levantó perezosamente de lo que simulaba ser una cama en cuanto los primeros rayos de sol empezaban a dar y caminó hasta la ducha improvisada. Louis, Louis, Louis. Era todo lo que pensaba, ni siquiera había pensado en la manera tan mala en la que había corrido a su novia cuando esta simplemente trataba de ayudar.

El contacto con la piel de Louis le era muy difícil de ignorar, pues esta era tan suave y blanca. Quería sentirlo, no el aspecto sexual, si no de una manera totalmente distinta a lo que el rizado alguna vez había sentido.

(...)

Días después

Lou paseaba montado en uno de los centauros hacía donde los hipogrifos se encontraban, eran animales que combinaban un cuerpo de león con cabeza, pecho, alas y garras de águila. La cabeza podía ser de buitre o de león. Las patas eran todas de león o todas de águila o bien aparecer dos y dos. El cuerpo del felino ocasionalmente parecía alado y que sea más pequeño, del tamaño del lobo, y algunas veces podía tener cola de serpiente.

Sin saber muy bien a que iba, el centauro se limitaba a llevarlo en su lomo.

Lou se encontraba muy ansioso por volver a ver a Harry, que buscaba cualquier cosa para distraerse y no escapar antes de lo debido. Tenía todo planeado, esperaría a que los guardianes de la entrada tomaran su descanso y saldría para volver justo antes de que ellos volvieran.

Durante los días que paso encerrado queriendo salir para acabar con su curiosidad se había dedicado a mirarlos todo el rato que pasaba frente a ellos, aprendido de memoria los tiempos en los que los Lamasu despejaban la entrada y cuanto tardaban en volver.

Antes de la puesta de sol, Lou entro en su pequeña choza hecha de madera y buscó entre los pocos trapos que tenía que le servían de ropa, en cuanto encontró algo decente se sacó la ropa y se puso la limpia.

Los trolls solían hurtar todo tipo de cosas para hacer enfadar a los mortales y entre esas cosas había prendas que le regalaban a Lou, algunas más grandes que otras pero el ojiazul las aceptaba gustoso.

Terminó de vestirse y se miró en un vidrio sucio que apenas si dejaba ver su silueta, bajó la cabeza y se dio cuenta de que aún iba descalzo. La noche pasada había notado que el chico rizado tenía unas bonitas botas de piel y se sentía extraño. No quería que el ojiverde supiera que le faltaban pares de zapatos.

Su cuerpo estaba marcado con dibujos, tenía casi los brazos llenos de tinta, en ellos había una brújula, un alce, un corazón y una soga que su padre le había hecho luego de cumplir los 15 años. A parte de estos tenía más que con ayuda de los traviesos trolls había hecho.

Acomodó su cabello a un costado y salió de su choza.

El campamento había desertado hace un par de noches y Louis esperaba que Harry apareciera de casualidad por ahí, había estado pensando mucho antes de decidirse y había llegado a la conclusión de que no debía dejar que Harry le viera otra vez, dejarlo pensar que estaba enloqueciendo, pero la necesidad de hablar una vez más con el rizado le pudo.

Eran cerca de las 7 pm y Harry ya se encontraba en un autobús hacía las afueras de la ciudad, miraba por la ventana sin dejar de pensar en que le diría a Louis si es que volvía a verlo, pero ¿Y Que pasaría si no estaba ahí otra vez? ¿Y Si todo había sido su imaginación?Realmente quería volver a verlo.

Louis corría en dirección hacía el arrollo pues cerca de este era donde había visto al rizado aquel día. Cuando estuvo más cerca divisó una cabellera rizada, Harry estaba sentado de espaldas a él sobre una de las miles de rocas grandes que había por ahí. Caminó sin hacer ruido y cuando estuvo frente a Harry se sentó con delicadeza sobre la hierva y cruzo las piernas. Harry sonrió anchamente al verle.

—Hola—Dijo en un susurro

Ninguno de los dos sabía que decir exactamente, ambos habían tenido el tiempo suficiente para hacerlo pero nada se les había ocurrido.

—Realmente... ¿Eres real? -Preguntó de repente el rizado, Louis sonrió y lo miró divertido.

—Lo seré si quieres que lo sea

Harry tragó con dificultad ante las palabras de ese chico. Miró los orbes azules de su acompañante y no pudo evitar perderse en ellos, Lou pegó un brinco y se levantó del suelo, comenzando a caminar por la orilla del arrollo. Se movía con delicadeza, tal y como las hadas lo hacían. El rizado lo seguía con la mirada, atento a cada cosa que Louis hacia como verlo inclinarse frente al agua y meter las manos.

—¿Quieres ver algo?—Le dijo con voz coqueta a Harry, este se acerco y se incoó junto a él. —Tienes que prestar mucha atención o no podrás ver nada ¿si?

Asintió y agudizo la vista, Louis metió una vez más las manos al agua y sin que Harry se lo esperarse le aventó toda el agua que sus manos habían juntado en la cara.

Harry se echó para atrás cayendo de espaldas al suelo tratando de recuperarse luego de tragarse casi toda el agua mientras Louis soltaba carcajadas y sostenía su estómago con ambos brazos.

  — ¡Serás...!— Gritó Harry aparentemente molesto, pero su voz no mostró ninguna molestia, al contrario... sonaba divertido. Secó el agua de su rostro y comenzó a mojar a Louis, tal y como él había hecho. 

  — ¡Basta, basta! — Gritó Louis con la ropa mojada y las mejillas sonrojadas, con una tierna sonrisa pintada en su bonito rostro. Harry le admiró deteniendo el juego y se dejó caer sobre la hierba.

 —¿Sabes?— Se recostó posicionando ambos brazos bajo su cabeza, con la mirada perdida en el cielo estrellado. — Hace tanto que no me reía tanto.

  — ¿Por qué?— Louis le imitó, dejándose caer a su lado.

 — No lo sé. Últimamente no me había sentido tan cómodo como ahora.

Ambos quedaron recostados sobre la hierba mirando las estrellas, ambos se mantenían en silencio, pero no era incomodo, estaban a gusto con la sola presencia del otro. Ambos sabían que no sería la última vez que se vieran. 

Este capitulo esta dedicado a a:

@Andi_tomlinson93

Espero que lo disfruten :)

Otra cosa, ayer estuve imaginando como sería el final de la fic y tengo dos muy buenos pero no lo sé :/ Prepárense para lo que viene :D

Gracias por leer, votar y comentar. :)xx

"Fool's Gold" || L.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora