"Fool's Gold" || L.S

Capitulo 8

"Un día, cuando Apolo, el Dios de la luz y de la verdad, era aún joven, encontró a Cupido, el Dios del amor, jugando con una de sus flechas.

—¿Qué estás haciendo con mi flecha? — preguntó Apolo con ira—Maté una gran serpiente con ella. ¡No trates de robarme la gloria, Cupido! ¡Ve a jugar con tu arquito y con tus flechas!

—Tus flechas podrán matar serpientes, Apolo —dijo el dios del amor—¡pero las mías pueden hacer más daño! ¡Incluso tú puedes caer herido por ellas!"

Parecía como si el universo se hubiera evaporado, como si sólo estuvieran ellos dos danzando en ñas nubes, flotando en la galaxia, sosteniéndose el uno del otro.

Harry pegaba a Louis cada vez más a su cuerpo, habían dejado de bailar y sus respiraciones de habían vuelto agitadas, ambos chicos se encontraban acostados sobre la hierba verde, besándose sin intención de pasar a algo más. Las sensaciones que Lou estaba experimentando en ese momento eran indescriptibles, era su primer beso y no sabía muy bien que debía hacer pero sin mencionar palabra alguna el rizado estaba instruyéndolo a la perfección.

Sus manos se posaban en las caderas del Lou, sujetándolo bien para que nadie pudiera arrancarlo de sus brazos. Louis tenía sus brazos atrapados entre el pecho de Harry y el suyo propio, podía sentir su corazón latiendo contra la palma de su mano. Harry se separó un poco de Louis sin soltarlo y pegó su frente contra la de el ojiazul para poder mirarlo a los ojos.

—No quiero apartarme nunca de tu lado, Lou. No quiero irme—Susurró, Louis cerró los ojos mientras soltaba un suspiro y volvió a unir sus labios con los de Harry...

—No lo hagas.—Dijo entre el beso.

—Esta noche quédate conmigo, yo te cuidaré— Harry le sonrió y sus hoyuelos aparecieron en sus mejillas dándole un toque infantil.

—No puedo, Harry. Sabes que debo volver o notaran mi ausencia.—Dijo afligido, Lou realmente tenía deseos de estar con Harry todo el tiempo pero sabía que era imposible.

—¿Dónde van a notar tu falta? ¿En dónde te esperan? — Se las arreglo para hacer salir su voz en un quedo murmuro. 

Harry se giró quedando él sobre el suelo húmedo, arrastrando a Louis consigo, lo subió con cuidado sobre su cuerpo a horcajadas, Louis se recostó contra el pecho del rizado y una sonrisa apareció en su rostro cuando sus ojos se cerraron y el corazón de Harry palpitaba con fuerza bajo su oído.

—Eres realmente hermoso, Lou—La voz de Harry retumbó en los oídos de Louis, causándole un estremecimiento, levantó su cabeza y le miró a los ojos con las mejillas tintadas de rojo. Harry subió su mano hasta estas para acariciarlas en un leve roce.

—Amor, tengo que irme...

(...)

— ¡Ay pero que melosos son tú y ese niñito!— Exclamó Safaa al ver a Lou entrar a la habitación, Louis pegó un bote con el corazón desbocado por tal susto.

—¿Qué haces aquí?— Preguntó Lou encendiendo las luces—Por favor vete, estoy cansado.

La ninfa salió de la choza con aires de superioridad y Lou se tiró a la cama, o mejor dicho, a lo más parecido a una cama. Harry llenaba su mente ese momento, no paraba de pensar que era lo que el futuro les depararía, se sentía ansioso y temeroso de saber. Poco a poco fue cayendo en las redes de Morfeo.

Los días corrían a velocidad pasmosa, el sol entraba por las cortinas de Harry y en un abrir y cerrar de ojos ya se encontraba la luna. Ningún día había faltado a ver a Louis, todos los días reunidos a un costado de ese arrollo, hablando de cualquier tontería, contando penas, riendo o dando palabras de aliento a quién las necesitase. 

No había día en que Harry no pensase en Louis y viceversa, no había día en la que uno no soñase con el otro, no había día en que no desease que pasara más rápido para que llegara la noche y pudiera encontrarse con su amor, todo iba bien entre ellos, sus sentimientos aumentaban y se hacían más fuertes con el paso de los días.

A la 9° semana, Harry pensó: "Como quisiera desnudar mis sentimientos por ti en una canción" 

Eran las 3 de la mañana y aún no lograba conciliar el sueño, su mente divagaba sobre todo en Louis, ese niño le hacía sentir algo tan fuerte dentro de él que no sabías hasta que punto podía llegar antes de explotar. Se levanto de la cama y cogió la guitarra que descansaba a un costado de su escritorio. Sus manos paseaban por las cuerdas creando la melodía perfecta y su mente maquinaba la letra perfecta para cantarle a Lou.

Varias tazas de café después y cuando el sol comenzaba a salir se dio cuenta de que la canción estaba hecha, él había escrito en ella todo lo que sentía por Louis, para ser sinceros, la canción no abarcaba ni la cuarta parte de lo que el rizado comenzaba a sentir.

(...)

Esa mañana Lou amaneció más animado de lo normal, se había pasado todo el desayuno con los faunos que amablemente le ofrecieron comida. Y el chico  no paraba de jugar, su animo lograba contagiar a los demás, incluso Safaa había dejado de gruñir cada dos por tres y ya no le miraba con burla como normalmente hacia, se le veía más contenta.

Luego de esto su padre volvió a enviarlo a revisar todos los nidales de los dragones, al llegar, Lou tuvo la oportunidad de ver como uno de los huevos gigantes y amarillentos se rompía y de este salía una cría de un cola cuerno.

Subió a uno de los prados donde los centauros pasaban sus ratos y descalzo caminaba sobre la hierba verde hasta llegar a uno de los lagos donde los centauros bebían agua. Vestía un suéter gris que había usado de la noche anterior, pues tenía el perfume de Harry impregnado y aunque la elfo se había ofrecido para lavárselo, Lou se había negado rotundamente siendo amable.

Ninguno de los dos chicos podía dejar de pensarse, ninguno de los dos sabían que estaban cayendo lentamente en un agujero negro, ambos chicos estaban enamorándose.

Este capitulo dedicado para: @CallHimHarreh por que sus comentarios me alegraron el día.

Espero que disfruten este capitulo tanto como yo lo hice al escribirlo. Díganme que piensan en los comentarios y si me regalan un votan me harían muy feliz :Dxx