29. Hámster

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Era pequeño, peludo y amarillo. Sus bigotes se movían y su pequeña nariz olía todo a su alrededor.

Adrien y Marinette estaban encantados, orgullosos, como si fueran padres primerizos... Aunque considerando que era su primera mascota, así se sentían.

Recordaban el día en que lo decidieron, una semana después de mudarse juntos.

Fueron a la tienda de mascotas al día siguiente, y el siguiente después de ese porque era tan difícil elegir.

Adrien quería uno gris, con mancha blanca

Matinette uno completamente blanco.

Pero el pequeño amarillo les robo el corazón.

Lo llevaron a casa junto a todos los implementos necesarios.

Y fue perfecto, el comienzo de su familia... Pero

¿Quién diría que los hamster eran nocturnos?

El sonido de la rueda se mantuvo noche tras noche. El pequeño escarba y come. Hacia sonar la reja de la jaula y caminaba por los tubos instalados por toda la casa.

-Te dije que deberíamos tener un gato- dijo Adrien con la almohada sobe la cabeza- porque suena tan fuerte- se quejó

-Tu fuiste quién dijo que un gato es suficiente- le recordó Marinette- espero que Misifus este bien con mi padre

-¿Porque no se duerme?- casi lloro el rubio, sabiendo que se tendría que levantar en un par de horas más para una sesión de fotos...como modelo había desarrollado la capacidad de dormir mientras lo preparaba e incluso mientras posaba, pero como fotografo necesitaba estar despierto para pensar en planos, luminosidad y poses...

-Puedes pensar esto como una práctica- Marinette dijo indiferente

-¿Práctica de que?- un bostezo lo interrumpió, cerrando los ojos, no notando la sonrisa y ojos llorosos de su esposa

-Ya sabes- ella se encogió de hombros- dentro de algunos meses pesadilla  no será nuestro único despertador

-¿No?- abrió los ojos ante el comentario, notando el estado de Marinette y un objeto en su mano- ¿eso es ...- preguntó señalando el objeto, la mujer solo asintió, su sonrisa más grande- ¿De verdad?

-Si

Adrien se abalanzó sobre su esposa, abrazándola y dejando pequeños besos sobre su rostro, ella solo río igual de alegre que Adrien.

Ninguno se percató de que el hamster se fue a dormir, dejando solo el ruido de la feliz pareja ante la noticia

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El hamster lo han tenido por más tiempo, y el problema del ruido se mantuvo por meses

Diferentes Caminos, Un Mismo destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora