Afterglow | Teen Wolf

9

- Aléjense de las ventanas- pidió el Sheriff- Guarden sus armas.

- Supongo que sabe quién está ahí afuera- murmuró Parrish.

- Me lo puedo imaginar.

- Están armado hasta los dientes.

- Por eso yo no lo estaré. 

- Iré con usted- se ofreció Parrish.

- No, ve con varios oficiales y revisa las salidas. Esperemos que no estemos rodeados. Quédate
atento. Asegúrate de que todos estamos en el mismo bando aquí.

Sin más que decir, salió, todos volvieron a entrar a la oficina cerrando la puerta.

- Tenemos que irnos... algo malo va a pasar- dijo Alina nerviosa.

- Dale una oportunidad. Sabe lo que hace- le pidió Scott.

- ¿Cómo sacamos a Jiang y Tierney de aquí? -le preguntó Liam.

- Al diablo. Le corresponde a Stilinski.

- Pero nuestro trabajo es mantenerlos vivos- dijo Scottt.

- No el mío- dijo Theo.

- ¿Quieres que lo mate? -preguntó Liam.

- No, mejor déjalo, ¿Podemos irnos, por favor?

- No iremos a ninguna parte. ¿No entiendes? -le habló Quinn- Estamos atrapados. Tienen todas las ventanas y puertas cubiertas. Vamos a morir aquí.

- ¿Alguien quiere matarla? -preguntó Theo, Malia se acercó a él con molestia.

- ¡Cállate! 

- Malia- Scott la alejo de él. 

- Oigan, hay una docena de ellos ahí afuera- dijo Lydia.

- Podemos ganarles- declaró Malia.

- Scott, son los últimos de la manada de Satomi. No los abandones- dijo Alina suplicando.

Scott suspiro derrotado.

- Está bien. Nos iremos, pero con Jiang y Tierney de aquí.

...

La manada camino hacia la puerta, viendo a lo lejos todos los cazadores.

- ¿Listos?

Lydia asintió, Scott giró a ver a Alina quien saco su energía en sus manos, después a Malia quien gruñó en respuesta, miró a Liam quien sacó sus garras preparado, vieron al último a Theo que, al recibir la mirada de todos, sacó sus garras de mala gana.

- Nadie irá a ninguna parte- dijo el Sheriff.

- Puedo pasar sobre ellos- dijo Lydia.

- No seremos los primeros en disparar. Aléjense de la puerta Todos. Parrish, lleva a estos dos a su celda.

Scott rápidamente se acercó a él.

- ¿Qué pasó?

- Nos dio hasta media noche.

Todos comenzaron a bloquear las puertas con los escritorios, los oficiales comenzaron a cargar sus armas, veían por las ventanas, atentos a cualquier movimiento.

De un momento a otro, la luz se fue.

- ¿Es fácil cortar la electricidad en una estación de policía?

- Demasiado fácil.

Un chico cayó al suelo luego de que una oficial llegara con unas pinzas en la mano.

- Sáquenlo de aquí- ordenó Liam con molestia.

- No, no pueden, ¿sí? Por favor, no. Ella sabrá que me equivoqué.

- Está con ellos.

- Liam- le habló Scott en tono de advertencia.

- ¿Sheriff?

- Es un mentiroso y está loco- dijo Liam.

- Y ahora está bajo arresto- dijo el Sheriff, y miro a Parrish- Enciérralo.

Tomó al chico para llevárselo, Alina vio cómo Theo tomó a Liam del brazo llevándoselo.

Un ruido llamó la atención de todos, pero no vieron nada hasta que escucharon el grito de Parrish.

- ¡Todos al suelo! -Scott tomó a Alina de la cintura, agachándose y cubriéndola con su cuerpo, para después, escuchar la explosión.

- ¿Qué diablos fue eso? -pregunto Malia.

- Una distracción- respondió Scott.

- Dijeron medianoche.

- La granada salió de aquí- dijo Parrish- Fue uno de los nuestros.

- Acónito- dijo Liam, mostrando un tubo pequeño con un líquido morado- Intentaba matarlos. Scott, tienes que ver algo más.

En lo que Scott y Liam fueron hacia las celdas el sonido de un cristal roto llamó nuevamente la atención, vieron una flecha incrustada.

Malia quitó la flecha, sacando dos pedazos de tela, Liam tomaron uno y uno, era una tela con el número 7 manchado de sangre.

- Es el número de Brett. 

- Intentan afectarnos.

- Funciona- dijo Malia viendo los ojos de Liam y Alina, los ojos dorados de Liam, y los ojos rojos de Alina.

Un grito se hizo escuchar por toda la estación, los oficiales fueron rápidamente, y después, un disparo se escuchó ahora. Entraron a la oficina viendo a dos oficiales muertos en el suelo.

- Eso no fue solo pánico. Está aquí con nosotros.

- ¿De qué hablas? 

- Lo que provoca el miedo, la misma cosa que hizo que los lobos se mataran.

- Esta con nosotros.

- Chicos, ya casi es medianoche- dijo Scott- No tenemos tiempo.

- Ya tengo dos cadáveres. No pienso darle a Monroe dos más.

...

El padre de Scott cerró la puerta de la oficina, mirando a todos los adolescentes que estaban ahí y al Sheriff.

- Scott, ¿estás seguro de esto? -preguntó Lydia

- Nosotros no- habló Liam.

- Nosotros no huimos- dijo Alina, a lo que Liam y Theo asintieron. 

- Pero es el único disponible. En una situación así, la mejor solución es frenar la escalada de violencia. Por eso me llamaste, ¿no?

- Honestamente, pensé que nadie vendría- admitió el Sheriff.

- De acuerdo. Nos iremos.

Las puertas de la estación se abrieron, salieron ambos oficiales, seguidos de los adolescentes, viendo a todos los cazadores que estaban ahí. 

Monroe miró victoriosa a la manada

...

La puerta de la veterinaria se escuchó, Mason entró viendo a Corey ahí parado.

- Dijiste que te irías. 

- Tuve que hacerlo. 

- Mentiste. 

- Todos mentimos- dijo Liam.

- ¿Este fue el plan todo el tiempo?

- Perdón, Mason- se disculpó Scott- Mi papá debía creer que dejábamos Beacon Hills. Todos deben creerlo.

- ¿Y qué pasa ahora? Pelearemos, ¿verdad?

- ¿Qué creerías que haríamos? -dijo Scott burlón, para luego tomar la mano de Alina- ¿Huir?