Capítulo XXXVII: Protección

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Asaf

Aunque afuera todo sea un caos, su cuerpo se mira como si reposara con total serenidad. Sé que hay vida ahí. Absurdamente, lo sé. Lo siento aun sabiendo que su corazón no está latiendo.

Solo sé que está viva de alguna manera.

O quizás la locura se está apoderando de mí.

Los truenos no dejan de caer allá fuera.

Ni una gota de lluvia.

Solo oscuridad y sonidos explosivos.

Inkla —suspiro.

Su cuerpo yace tendido en medio de la sala rodeada por rosas negras manchadas con mi sangre y rociadas con sal, las cuales forman un círculo, como protección ante otro demonio. La barrera solo puede proteger a un ser. Solo puede protegerla a ella. Yo estoy aquí sentado en las escaleras esperando el arribo de Padre o cualquier mensajero, aunque a kilómetros no puedo rastrear la presencia de algún ente.

Apreciarla ahí, frágil, rodeada de rosas negras me conecta con algo lejano y cercano a la vez. Justo aquí en la sala. Ella, con esa apariencia, las rosas negras, la mansión y yo se hace tan familiar la escena.

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⏰ Última actualización: May 26, 2022 ⏰

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Demonios de Día © - [Serie pesadillas] [Libro #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora