Imposible || Tony Stark

"Capítulo 7: A través del olvido"

Sábado, 6:30 a.m.

[Lauren]

Mis manos temblaban, esta sensación de desconcierto... duda, miedo... realmente no sabía lo que era, pero no me gustaba para nada.

Estaba sentada frente al doctor y mientras este hablaba conmigo, mi mente se encontraba divagando en miles de pensamientos -ninguno bueno- acerca de esta situación.

Sus palabras resonaban una y otra vez...

Hola Piper

Se oía como un susurro y un estruendo a la vez, me causaba escalofríos. Le daba vueltas al asunto y aún, a pesar a de todo no podía creer que esto estuviera sucediendo.

No podía estar sucediendo...

¿Dónde estamos?

- Señorita Hyde - me llamó.

Salí de mi trance rápidamente y levanté la cabeza para mirarlo. Me miraba... preocupado, porque cómo iba a mirarme sino con la expresión que tenia.

- Necesito que me diga que entiende lo que está pasando - reiteró - ¿Tiene alguna duda?

¿Y a ti qué te parece? - pensé. Pero era en vano irritarme, los nervios me ganaban.

Me acomodé un poco en el asiento y tan solo pude pensar en lo que había dicho, o más bien, lo que más me había impresionado.

- ¿A quién más recuerda? - salió de mi boca, no como una duda, sino como un verdadero miedo de lo que fuera a contestar..

Negó lentamente con la cabeza y me señaló

- A nadie - contestó - Solo te recuerda a ti...

Hola Piper

Hola Piper

- No, no puedo... no puede ser, esto es-... Dios, ¡Esto no puede ser! - exclamé con un nudo en la garganta.

El hombre frente a mí solo se quedó en silencio. Creo que no solo era abrumador para mí. Imagina diagnosticar al mismísimo Anthony Stark con pérdida de memoria... día memorable en su trabajo.

Hubo unos segundos de silencio y luego, él volvió a hablar...

- Escuche, sé que puede ser difícil, pero ahora... necesitamos su ayuda. Él la necesita...- me dijo, casi como una súplica - Tal vez sea complicado de asimilar en estas primeras instancias pero una vez que logremos ayudarlo a comenzar su vida otra vez será mucho más fácil - no hubo respuesta de mi parte, solo asentí lentamente - Bien, ¿algo más?

- ¿Qué pasará ahora? ¿Se supone que deba quedarme o...?

- Bueno, estará un par de días aquí, los golpes y heridas lo dejaron muy débil asi que necesita reposo y, no recomendaría un alta para él en ese estado - explicó - Se quedará aquí, y luego... - miró la hoja en la que había anotado un par de cosas antes y negó - Creo que solo quedarán las sesiones de kinesiología y demás controles.

- De acuerdo - murmuré y bajé la mirada comenzando a jugar con el anillo que reposaba en mi dedo.

Se levantó sin decir nada más y caminó por el pasillo, no lo veía pero escuchaba claramente sus pasos alejándose. No me concentré en eso, sino en el silencio abrumador que acaparaba toda la sala de espera.

Tenía sueño, hambre y ganas de despertarme ahí mismo y que alguien me diga que todo esto era una broma. Lo anhelaba

Pero no era la única...