Quema como el fuego [TERMINADA]

CAPÍTULO 8: EL ENTRENAMIENTO

Madison

Llegué a casa y lo que menos quería era que alguien estuviera dentro, pero estaban todos al completo. Ashton acababa de llegar. Estaba dejando su mochila en suelo cuando me vio entrar y la dejó caer al ver la cara que traía. Notó al instante que algo había ido mal. Se acercó a mí y volví a sentir ganas de llorar al recordar los ojos decaídos de Nancy. Ashton me ocultó de la mirada de Lena y Stephen poniéndose frente a mí pero eso no iba a evitar que preguntarán por qué estaba apunto de llorar.

— ¿Madison? ¿Qué ha pasado? — susurró Ashton.

Levanté los ojos encontrando que los suyos se movían sobre mi rostro. Analizándolo como si así fuera a saber que ocurría.

Lena llegó a la entrada y Stephen vino detrás de ella, aparentemente preocupado.

¿Me podía creer su cara de preocupación?

No quería llorar, al menos no delante de ellos. Implicaba demasiado que explicar y reconocerme a mi misma que estaba cambiando.

Mis sentimientos se estaban despertando de nuevo y en principal era por Ashton.

Lo que había dicho Nancy podía ser cierto. No era tan inverosímil pensar que mi estado de ánimo cambiada según el de Ashton. Haciendo memoria de los últimos días así había sido.

Y en ese momento estaba frente a mí dudando sobre que hacer, apunto de mostrar los mismos ojos vidriosos que yo. Veía sus brazos moverse despacio como si quisiera tocarme pero no supiera si esa era la solución.

— ¿Ha pasado algo malo? — la pregunta de Lena detuvo mis pensamientos pero no dije nada.

No sentía que pudiera responder por que realmente no era que cosas malas habían ocurrido si no que cosas me salían bien y en ese momento no había ninguna buena.

Respiré hondo.

Seguía luchando contra mis emociones porque cuando me sobrepasaban, estaba más cerca del filo, más cerca del fuego y de desde ahí estaba a un paso de estallar.

— Nancy y yo nos hemos peleado...

Solté al final para no dejar salir el fuego que me trepaba por la garganta.

Hubiera preferido contárselo a Ashton en privado, pero ya no podía echarme atrás.

— ¿Nancy Green? — preguntó Stephen extrañado.

No me veía con ganas de responder a Stephen y Ashton lo sabía asique respondió por mí.

— Si, ¿por? — Ashton fue directo con su pregunta por el tono de la de Stephen.

— No sabía que era amiga de la hija de Sharon — respondió sin más.

— ¿Por qué creías que te había pedido hoy que Sharon la llamara? Era porque Nancy nos había dicho que necesitaba hablar con ella. Son amigas — le aclaró.

"Son amigas".

Igual Nancy tenía razón y ni si quiera llegamos a serlo. Si por en algún momento lo fuimos, eso quedó atrás.

— Ah sí... — Stephen cerró los ojos un instante como si se acabara de dar cuenta.

— ¿Quieres que te prepare algo de comer? — sugirió Lena acercándose a mi para acariciar mi brazo.

Negué con la cabeza y esa vez me eché para atrás.

No quería su consuelo.

— Prefiero irme arriba — dije tras tragar saliva, notando mi garganta como una brasa.