CAPÍTULO 24: EL ÚLTIMO PARTIDO

69 39 4
                                    

Madison

Salimos fuera y sentí como si hubieran pasado años estando ahí abajo. Tenía todo mezclado en la cabeza y me costaba diferenciar que había ocurrido de verdad y que no. Lo único que podía asegurar que era real era que la Sra. Kelly formaba parte de esa locura y era nuestra única salida.

— ¿Estás bien? Estás pálida — acabó preguntándome Ashton.

Asentí, intentando sacar de mi mente esas imágenes, pero al ver su rostro se clavaron más en mí. Pareció dejarlo pasar, pero sabía que más tarde me preguntaría de nuevo por ello.

— Nosotros tenemos que irnos ya. Lena nos está esperando — dije mientras nos alejábamos.

— ¿Por qué tanta prisa? — preguntó Alissa.

— Visita sorpresa — estaba poco convencida de que fuera a ser así. Sabía que iba a ser de todo menos una buena sorpresa.

— Eso no suena muy bien — coincidió ella.

— Aún no sabemos quien o quienes son — le aclaró Ashton.

— ¿No confías en Lena? — le acabó preguntando Alex.

— No lo sé. No quiero creer lo que llevo temiéndome semanas.

Alex puso una mueca. Sabía que cada vez salía más gente a la luz en la que no podíamos confiar y Lena y Stephen encabezan la lista.

Nos despedimos de ellos y nos adelantamos comenzando a callejear. Nos sentíamos vulnerables caminando por la avenida con los ojos de las personas sobre nosotros como si hacerlo estuviera prohibido, pero así era.

Nuestra casa iba a ser nuestro único lugar seguro sobre todo cuando Lena y Stephen no estuvieran. Ya no me fiaba de ellos. Ashton quería seguir teniendo esperanzas en que Lena no era una de ellos, pero yo ya no veía la parte buena en ella. No nos había atacado ni nos había hecho daño, pero sabía que era cuestión de tiempo.

Estaba deseando llegar a casa y poder estar a solas al menos por unos minutos con Ashton como solíamos hacer, pero esa visita sorpresa nos lo iba a impedir. No me imaginé quien podría ser, pero cuando pusimos un pie dentro no pude creer lo que estaba viendo.

Harper apareció por la puerta de la cocina y se lanzó directa hacia Ashton. Él retrocedió, pero no antes de que ella llegara a besarle.

Me quedé helada pero la sangre de mis venas no tardó en arder al ver aquello. Di un paso al frente, dispuesta a apartarla de él y me miró, retándome con la mirada.

— Yo que tú no lo haría — dijo advirtiéndome —. Si no queréis que abra la boca y cuente lo que estáis haciendo será mejor que me sigáis el juego. Hoy eres mío.

— Estás loca si crees que voy a seguirte el juego — respondió él apartándose de ella.

— ¿No me crees capaz? — hizo una pausa esperando su respuesta, pero él no abrió la boca — ¡Lena!

Ashton le tapó la boca rápidamente y accedió a regañadientes para que no montara una escena.

— Dime Harper — dijo Lena asomándose desde cocina.

— Nada, es que huele genial. No puedo esperar más para probarlo — sacó una sonrisa que no podía dejar de ver como maliciosa. Era como el demonio encarnado. Al lado de Stephen, él era totalmente inofensivo.

Harper tiró de Ashton hasta la cocina y él me miró con la mayor expresión de incomprensión que jamás hubiera visto, pero la mía no era muy diferente. Lo único que cambiaba era que él no tendría más ganas de matarla que yo.

Quema como el fuego [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora