Veintiocho

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            Tres días faltan para el enfrentamiento con los vampiros, y yo lo único que quiero hacer es permanecer a lado de mi brujita, pero en cambio estoy horas y horas con los lobos y brujos de alto rango discutiendo estrategias

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            Tres días faltan para el enfrentamiento con los vampiros, y yo lo único que quiero hacer es permanecer a lado de mi brujita, pero en cambio estoy horas y horas con los lobos y brujos de alto rango discutiendo estrategias. Ella esas horas permanece acostada en su cama, mientras su abuela y Kamilah la ayudan a recuperarse más rápido, Jamil acude a las reuniones en representación del aquelarre de Kanye.

Hemos recorrido los límites de la manada una y otra vez, enviado centinelas a espiar las afueras de la fortaleza del clan, otros a hacer reconocimiento del terreno que habíamos elegido para que se desarrolle la batalla. El micrófono que habíamos implantado en el vampiro, había funcionado, y él no nos había mentido, la princesa Arinka realmente lo había mandado para advertirnos de todo, y gracias a eso pudimos armar nuestro plan de ataque. Todo estaba listo, cada manada y aquelarre sabía qué hacer, todas las manadas más lejanas se encontraban distribuidas entre las manadas más cercanas a White Moon, las reuniones las hacíamos por videollamada para no levantar sospechas de los vampiros. Estamos listos, solo falta que llegue el día.

-¿Qué haces aquí? – pregunto frunciendo mi ceño cuando entro a la mansión del Alfa y veo a Aila sentada en el sillón del living junto a Aitana, Sanza y Kamilah, Kilian estaba en el piso rodeado de sus superhéroes.

-Necesitaba levantarme de la cama, ya éramos una sola – se queja ella y da una brillante sonrisa mientras estira su mano para que yo la tome. Yo solo la miro con el ceño fruncido.

-Debes estar descansando.

-Estoy bien Anoki – se queja ella - y estoy descansando, pero en otro lugar, cambio de ambiente.

-Pero...

-Anoki cállate y siéntate – me dice mi brujita, y luego de bufar me siento a su lado.

-Este es un buen momento para recordar cuando Anoki se burlaba de ti, ¿no Einar? – dice Otto y yo lo fulmino con la mirada, Einar ríe mientras se acerca a la Luna para saludarla.

-¿Cuándo dices tú? ¿Cuándo yo hago todo lo que mi mate me dice? – pregunta burlesco y escucho como Aila intenta disimular una risa.

-Sí, o ya sabes, cuando decía que a él nunca lo iban a dominar – dice Otto disimulando sacarse una pelusa.

-¡Oh! ¿A eso te referías? Yo pensé que hablabas de...

-¡Bueno ya! – digo gruñendo y escucho la risa de todos, mientras yo me cruzo de brazos y miro mal a mis supuestos amigos.

-Nunca pensé que iba a llegar este día de ver así a Anoki – dice Mason abrazando a su Luna.

-¿Tú también? – pregunto frunciendo el ceño y siento las pequeñas manos de mi mate enredándose en mis brazos, deja un beso en mi brazo y apoya su cabeza ahí, yo enseguida descruzo los brazos para poder abrazarla y hacer que deje su cabeza en mi pecho.

Una Bruja para el BetaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora