capítulo 1

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7 años atrás....






Siempre fui un niño mimado en todo el sentido de la palabra. Mis padres nunca me han negado nada, muchos me creen con suerte por haber nacido en una cuna de oro y, tienen razón. Lo tengo todo cuál rey y eso se siente genial.

Soy popular, un alfa muy codiciado entre las omegas y me gusta, como le gustaría a cualquier alfa.

Pero mi corazón pertenece a Min Yoongi, él es mi omega. Mi omega es hermoso, me gusta demasiado, lo amo.

Pero...

Seamos sinceros, por más que amemos a una persona hay ocaciones en que sin querer nos sentimos atraídos por otros y es algo que no se puede evitar. Aunque solo te guste esa persona y no pase de solo eso, de solo gustarte y ya, no puedes negar que le has sido infiel con el pensamiento a quien dices amar.

Soy humano, se que tengo defectos, no nací para pretender ser perfecto.

Tampoco digo que Yoongi signifique poco o que lo ame a medias, lo amo de verdad, y quisiera pasar el resto de mis días con él.

Y sin embargo... Hubo una tentación por la que no puede evitar caer...

Su nombre es Dahyun, una hermosa omega que me atrae físicamente.

Sí, sé que soy una mierda, pero juro por la madre luna que solamente sería un encuentro rápido, algo como; te di y no te conozco, porque realmente no me podía imaginar lo que pasaría si Yoongi se enterará, y no quería perderlo.

No obstante quizá el carma fue instantáneo incluso antes de que causará el daño definitivo.

Cuando yo y Dahyun nos encerramos en un salón para tener sexo, no esperé que alguien, o mejor dicho él, empezará a golpear la puerta.

Yo sospechaba que a Dahyun le caía mal Yoongi, pero nunca imaginé que lo hiciera a tal punto como para enviarle una nota diciéndole que cogería con su novio y que incluso le daría la hora y el lugar.

Todo paso tan rápido y cada vez estoy más convencido de que...

Soy una mierda.

¡Oh Yoongi! Justo ahora te encuetras llorando y tu amigo trata de convencerte para que te vallas de aquí.

Dahyun se ha ido después de burlarce en silencio y de eso ya son varios minutos.

Te he tratado de explicar que no pasó nada más allá de un simple beso, pero tus lágrimas continúan callendo cómo una cascada sin fin, tan silenciosas como a veces lo eres tú.

—Por favor, Yoongi, perdóname, te amo, no soportaría perderte...

Tu puño se estampa contra mi mejilla y me llamas mentiroso, me maldices de todas la formas posibles y, juro que cada una de tus palabras me duelen, pero hay una en especial que me hace ver caer mi mundo en mil pedazos.

—Terminamos.

—¡Yoongi, no! Lo arreglaremos de alguna manera —empiezo a suplicar.

Intento tomar tus manos entre las mías pero tú te deshaces de mis agarres bruscamente. Tu tristeza ha dado paso a tu furia, y sé que de esto pasarás al rencor y, finalmente terminarás por odiarme.

Se que estuvo mal, pero por favor, no quiero perderte.

—¡Ya déjalo en paz, Kim SeokJin! —me espeta Hoseok y me empuja lejos de ti.

—¡Tú no te metas! —gruño en respuesta a su agresión.

Tú aprovechas y te empiezas a alejar, y yo al percatarme de esto, corro tras de ti como si alcanzarte me asegurará tu perdón.

—Yoongi, por favor, te amo, ella no significa nada.

Pero tú rebajas mi último intento a nada cuando te volteas y me das una gélida mirada, gritándome con esa simple expresión que si continuó así solo enpeorare las cosas.

Mi lobo interior retrocede y agacha las orejas en señal de derrota.

Cuando te veo retomar tus pasos, te dejo marchar. Tu amigo pasa a un lado mío y me para el dedo medio. Bueno, quizá meresca ser tratado así después de todo.

Me llevo las manos a la cabeza y tiro levemente de mi cabello. Hay un nudo en mi garganta y siento ganas de llorar.

He perdido lo que más quería solo por un deseo estúpido que no valía la pena.

¿Yoongi, está mal tener un poco de esperanza después de esto?

Antagonista [JinSu/JimSu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora