En memoria a Leash Salazar

20

Año: 1975

Edad: 16 años (576 años)

-¿Estás ahí?- lo escucho Leash preguntar

Ella lo miró, poniendo una sonrisa en su rostro, casi como si fuera un reflejo.

-Claro que sí- dijo ella

Severus la miró con un poco de inseguridad, pero decidió no abordar más al respecto.

-¿Si vendrás hoy al aula de pociones?- continuo Severus la conversación, sirviéndose del banquete que tenían en frente.

Estaban los dos sentados en su mesa de Slytherin, era el lugar que tomaron el primer día de clases, años atrás, cuando fueron asignados a su casa y desde entonces siempre tomaban sus respectivos asientos; Leash no podía imaginarse sentándose en otro lado de esa mesa que no fuera ahí.

-Claro que sí, no me lo perdería por nada- le aseguro ella, siguiendo su ejemplo y empezando a comer

-Pues has faltado a las últimas dos reuniones, entonces...- dijo Severus entre dientes pero lo suficientemente fuerte para que ella escuchará

-Sí, lo sé, lo lamento- dijo apenada

Severus la miró con un poco de culpa.

-Esta bien- se retracto- Lo entiendo, has estado con...- no pudo decir su nombre, pero no fue necesario, su mirada lo traicionó y llevo sus ojos a la mesa de Gryffindor.

Lily estaba sentada en su respectiva mesa, estaba hablando con Remus Lupin de algún libro que leyeron en común.

Tenía meses que Sev y Lily no se hablaban, habían habido muchos roces en su amistad y las únicas veces que se veían era cuando Leash los invitaba a ambos, pero las cosas cada vez eran más incómodas así que esos momentos cada vez eran menos.

Leash sabía que se habían peleado, algo había pasado y ese había sido el principio del fin, pero ninguno de los dos se atrevía a  decirselo.

-Sí, he estado pasando más tiempo con los Gryffindor- dijo Leash intentando alejar la atención de solo Lily

Eso logró el propósito, pero llevo la conversación a un lugar donde no quería.

-Sigo sin saber que tiene de bueno James Potter- dijo volteando los ojos

-Besa bien- se burló Leash para hacerlo molestar

-Ugh, que asco- se quejó él y Leash rio- No puedo creer que lo hayas besado ¿Para que?- le volvió a preguntar por quinta vez desde que le contó

-Asi son las fiestas Sev, tomas alcohol que sabe horrible, bailas canciones que nadie sabe bailar y besas gente que apenas si conoces- se encogió de hombros

-Suena horrible- continuo él- Pero bueno, mejor hablemos del otro inepto que besaste- dijo dándole un sorbo a su jugo

Leash tiro su vaso y paledecio al instante.

-¡Leash, ten más cuidado!- dijo Severus levantándose de la mesa para dejarse de ensucia y tomo unas servilletas para limpiar sus platos

-¿Quién te dijo?- preguntó Leash en pánico

-¿Quién me dijo que?- preguntó molesto, aún limpiando la bebida que ella había tirado

-Del otro chico- agregó asustada

Severus la miro como si estuviera loca.

-Nadie, nadie me dijo, pero no es difícil de descifrar, siempre te besas con Rodolphus en las fiestas- le recordó, como si ella lo hubiera olvidado- ¿Que te ocurre?- volvió a preguntarle, regresando a su lugar