El sol estaba ocultándose, seguiste caminando sin rumbo, hasta topar con una vista maravillosa, te quitaste los zapatos, y sentiste la arena en tus pies, era una sensación relajante, caminaste a orilla del mar, dejando que el agua fresca tocara tus pies, te sentaste a unos cuantos metros del mar.
- ¿Por qué estoy tan molesta? - arrojaste una concha al mar.
- Me niego a creer que ella sea importante para el Sr. Min, pero ¿y si dijo la verdad? ¿Cuál es su relación con el Sr. Min? ¿También le ha hecho lo que a mí?
cubriste tu rostro con tus manos y cerraste los ojos.
- ¡NO! ¡BASTA! ¡BASTA! - Diste pequeñas palmadas en tu rostro.
- Quiero dejar de pensar en eso, me está enfermando esta situación- abrazaste tus rodillas.
El sonido del mar era relajante, distraía un poco mis pensamientos, pero no del todo, quería que el mar se llevara todos mis problemas, esa discusión había absorbido mi energía, el sobre pensar todo estaba agotando mi cabeza. Cuando sentí una pequeña vibración en mi pierna derecha, saqué mi teléfono y tenía un mensaje de la secretaría, me pedía regresar urgentemente a la empresa.
- ¿Cometí otro error? No veo porque me estén pidiendo regresar a esta hora- dijiste fastidiada.
Mi cuerpo se volvió a sentir tenso, un error implicaba un nuevo castigo, y honestamente no me sentía de buen humor. Me levante de la arena, sacudí un poco mis pantalones, mire una vez más esa vista maravillosa, y salí de la playa.
Cuando entre a la empresa, la secretaría seguía en el computador escribiendo, a pesar de que su turno había terminado hace horas.
- ¿Por qué sigues aquí? ¿el Sr. Min te puso a hacer horas extras?
- No cariño, tranquila, te mande llamar por algo importante- se levantó de su silla.
- Dime- dijiste preocupada.
Extendió su mano y te entrego un sobre- Toma.
Abrí el sobre y era un cheque, mi primer sueldo, me sentí aliviada al recibirlo.
- ¡Gracias! - sonreíste.
- Hoy se gira nomina a todos en la empresa, por eso sigo aquí, debes ir con el Sr. Min a que te firme tu cheque.
Tu sonrisa se borró de inmediato, cuando escuchaste esto, y la secretaria se dio cuenta.
- Préstame tu cheque, iré a que me firme el mío, y le pediré que me firme el tuyo de paso.
Corriste a abrazarla -De verdad gracias.
La secretaria entro a la oficina del Sr. Min con ambos cheques, te sentaste en tu silla y esperaste, cuando llego alguien a tu escritorio.
- Hola Linda, ¿Por qué sigues aquí?
- Tae que gusto verte, estoy esperando que firmen mi cheque.
- ¿Es tu primer cheque no? - pregunto curioso.
- Si- Dijiste contenta.
- ¿Qué harás con tu primer sueldo?
- Tengo bastantes gastos- Dijiste un poco decaída.
- También debes disfrutar ese dinero, te ha costado mucho ganarlo, así que consiéntete, aunque sea con algo pequeño, ya sea un dulce, una comida, un accesorio, pero inviértelo en ti.
- Nunca lo había visto de esa forma, vivo sola y normalmente no invierto en mi de esa manera.
Tae inclino su cuerpo hacia ti, y tomo tu barbilla sutilmente.
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Querido Sr. Min
FanfictionLa personalidad de aquel hombre de tez blanca, mirada profunda y no titubeante, que esta acostumbrado al perfeccionismo, y si algo no sale como el quiere, sus métodos de corrección son todo menos lo que imaginas. ¿Qué es lo que te hace soportar tan...