Era increíble la forma en que todo puede cambiar en meros segundos.
Sin siquiera esperarlo, sin pensarlo o predecirlo de alguna manera.
Sus orbes marrón que parecían el mismísimo oro ante los rayos del sol o al sonreír reluciente como solía hacerlo hace años, pronto fueron cubiertos por lágrimas que cayeron por sus mejillas dejándole apreciar nuevamente esa imagen ante ella.
Dos de las personas que más amaba, los únicos que le quedaban, unos de los pocos que permitió entrar a su corazón y les expresó puramente sus sentimientos confiando ciegamente en sus palabras.
Se conocían desde niños, ella la conocía desde que llegaron al mundo, compartieron miles de cosas incluyendo la misma leche materna, el mismo cuarto, las mismas frazadas cuando dormían juntas por miedo a la oscuridad.
Y a él, lo conoció desde antes de la pre adolescencia, cuando aún eran considerados niños, fueron amigos hasta que surgió un tímido e inocente romance, estuvo a su lado en los momentos más difíciles, le permitió ver y escuchar su llanto, escuchar sus lamentos y ruegos, lo dejó ver su parte más vulnerable y...él le juró jamás fallarle.
Pero fue estúpida al creer que solo porque ella sufrió y estaba sola en el mundo, una desconocida entidad sería misericordioso con su vida dándole un poco de amor y comprensión que provenía de quien creyó que la amaría al menos hasta unos años más.
Su bolso cayó de su mano igual que las llaves en su otra mano causando el suficiente ruido para detener la escena ante ella.
Su hermana del corazón, su amiga de la infancia, y su primer amor romántico, su otro amigo de la infancia...su esposo.
La habían traicionado.
Un nudo se formó en su garganta sintiendo un profundo odio hacia aquellos que la veían con terror ante su presencia.
Expresó su sentir frunciendo el ceño e ignorando las lágrimas correr por sus mejillas, apretó sus puños sintiendo que su cuerpo tembló y pronto soltó un sollozo mirando hacia otro lado hasta que sonrió temblorosa haciendo su flequillo hacia atrás.
Cuándo, cuándo pasó, porqué no se dio cuenta.
Escuchó el movimiento de ambos que se vestían con rapidez pero ella siguió mirando la pared enterrando sus uñas en su cuero cabelludo esperando que el dolor desaparezca la escena a su alrededor.
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||𝐀𝐑𝐓𝐄𝐌𝐈𝐒𝐀.||² ⁽ᴾᵃᵘˢᵃᵈᵃ⁾.
Fanfiction𝐑𝐞𝐧𝐚𝐜𝐢𝐨 𝐜𝐨𝐦𝐨 𝐮𝐧𝐚 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐚 𝐝𝐞 𝐎𝐛𝐞𝐥𝐢𝐚, 𝐞𝐥 𝐢𝐦𝐩𝐞𝐫𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐮𝐧𝐚 𝐧𝐨𝐯𝐞𝐥𝐚 𝐭𝐫𝐚𝐠𝐢𝐜𝐚. 𝐔𝐧𝐚 𝐧𝐨𝐯𝐞𝐥𝐚 𝐝𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐞𝐥 𝐞𝐦𝐩𝐞𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫 𝐂𝐥𝐚𝐮𝐝𝐞 𝐝𝐞 𝐀𝐥𝐠𝐞𝐫 𝐎𝐛𝐞𝐥𝐢𝐚, 𝐬𝐮 𝐧𝐮𝐞𝐯𝐨 𝐩𝐚𝐝�...