[HIATUS] UṈCOṈDIΓIOṈΔLLɎ || NΔMGI - OMEGΔVERSE

~[15]~

‧͙⁺˚･༓☾ 𝓜 𝓲 𝓷 𝓨 𝓸 𝓸 𝓷 𝓰 𝓲 ☽༓･˚⁺‧͙

Terminaba por arreglar mi ropa, unos pantalones de mezclilla claro, una camisa de manga larga a cuadros de color negro y un suéter cerrado del mismo color, este lo había amarrado a mi cintura pues aún no veía necesidad de ponérmelo, había dado mi ducha y esparcido el inhibidor por todo mi cuerpo. Hoy iría a un lugar "importante" para mí, pues ahí se encontraba una persona muy especial para mí, solo que necesitaba llevar un poco de dinero en mi cartera para pagar su estancia, saqué mi maletín y tomé lo necesario para guardarlo en mi cartera. Una vez estuve completamente listo caminé a la entrada del departamento para poder sacar del zapatero unas vans negra, ya sé que tengo un problema con el negro, pero hay que admitir que es un color bastante genial. Cerré todo bien y finalmente abandoné mi hogar para empezar mi aventura.

Esperé en la parada de autobús más cercana alrededor de unos diez minutos, transcurrido este tiempo la ruta que esperaba había llegado, subí y mostré mi credencial de estudiante para pagar solamente la mitad del precio total, ventajas de ser estudiante. Tomé un asiento cerca de la ventana y mientras llegaba a mi destino coloqué un poco de música en mi celular para escucharla con audífonos. A pesar de que esta visita la hacía mensualmente, siempre me daba un cierto malestar en todo mi cuerpo, la música era mi camino para escapar de la cruel realidad.

Tiempo después ya estaba parado frente a la entrada principal del sitio, analicé el lugar notando las paredes altas grises que lo separaban del resto de edificios, pasé por la puerta de barrotes metálica y lo siguiente que aprecié fue una bonita zona verde que rodeaba todo el lugar. Un edificio de 10 pisos se alzó sobre mí, con fachada completamente blanca y muchas ventanas por alrededor, excepto la planta baja, esta tenía cristales como paredes y claramente no había ventanas. Alcé mi vista para leer por milésima vez el nombre del sitio, letras neones azules tenían las iniciales "HGS", bajo de estas se podía leer todo el nombre completo, "Hospital General de Seúl", respiré profundamente una vez antes de atravesar el umbral de la entrada principal.

Rápidamente el olor a químicos y medicamentos golpeó mis fosas nasales, había mucha gente allí y allá, enfermeras y doctores caminando de un lugar a otro atendiendo a sus pacientes. Fui hasta la recepción y me registré como visita con la beta encargada del día de hoy, terminé de anotar mis datos en la lista y tomé el ascensor en cuanto tuve el permiso de pasar. Presioné el botón del piso 7 y esperé a llegar. Una vez en el piso busqué con la mirada la habitación 715, la cual estaba ubicada en el primer pasillo de a la izquierda del lado derecho, nuevamente respiré profundamente antes de tocar la puerta tres veces, recibí un "pase" y entré de inmediato.

--Hola de nuevo

--Hola... madre -digo cerrando la puerta detrás mío-

--Me da mucho gusto verte de nuevo hijo, ¿Cómo has estado?, ¿Qué tal la escuela?, vamos ven y cuéntale todo a tu madre -dijo animada señalando una silla a un lado de la camilla, sin mucho que protestar caminé y me senté en esta-

--Pues no hay mucho de qué hablar, las clases empezaron la otra semana, mañana vamos de nuevo, y hasta ahora todos los maestros se han mostrado muy amables y pacientes, pero vete a saber cuánto les durará esa paciencia -comenté cruzándome de brazos-

--Eso es agradable de escuchar, solo un año más y mi querido bebé ya estará graduado de la Universidad, cuando salga me aseguraré de hacerte una maravillosa comida para que invites a tus amigos, y a tu pareja si es que ya la tienes -mencionó con sus ojos brillosos-

--Mamá no empieces -canturrié apenado- ya no soy un cachorro, acabo de cumplir mis 23 años

--Ya lo sé, pero aun así sigues siendo mi querido cachorrito -acarició mi cabello-