El Fiscal del distrito Neji Hyūga ha visitado a Naruto para pedirle que le ayude en un caso de tortura y asesinato, puesto que necesitaba de un detective que conociera la ciudad y entendiera sus dinámicas. El joven policía, llevado por la desesperac...
Los personajes de Naruto no me pertenecen, sin embargo, la historia sí.
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Naruto despertó y sus ojos trataron de acostumbrarse a la luz cálida que se extendía por el lugar. No era luz artificial, era en realidad la luz del sol filtrándose por la amplia ventana frente a él, el paisaje verde y exuberante era distinto, más vivo y suave, pero todo en él se hundió cuando se percató que seguía en la misma prisión de antes, solo que estaba en una habitación distinta y el olor de Itachi estaba por todas partes.
Ese perfume mezclado con cuero invadió sus sentidos, el olor a jazmín fue penetrante y le acarició en la piel como viento de verano. Se hundió en la cama y la cobija que le mantenía cubierto el cuerpo le tapó el rostro, el olor se hizo más profundo y pensó en Lola, la prostituta que Tsunade le había encomendado sacar del Barrio Rojo porque se había enamorado y el bebé en su vientre estaba siendo imposible de esconder por mucho más tiempo.
El hombre responsable era un panadero dueño de un pequeño negocio de postres y panes que apenas y sobrevivía en ese lugar. Naruto estaba seguro de que hubiera sido mejor que la mujer abortara el feto y ahorrara un poco antes de escapar con el idiota, solo que Tsunade y las demás chicas ya habían reunido el dinero suficiente para comprarle la libertad a su proxeneta: ellas confiaban en su pequeña y ridícula historia de amor para sacarla de ahí y hacerla feliz.
El hombre panadero no era malo. Naruto había investigado todo sobre él y su único defecto fue que era demasiado bueno. No muy inteligente dado que no usaba condón con Lola porque ella quería sentirlo por completo o le había creído de buenas a primeras que ese bebé era suyo, si embargo, al final de cuentas y para su dolor de cabeza, era bueno.
Amable y tonto la amaba a ella.
-Estoy sucia, pero él me trata como si fuera nueva. Como si fuera pura. Como si estuviera limpia. Como si el mundo no me hubiera contaminado. Él me libera de mis cadenas.
-Ese amor no va a poner comida en tu mesa ni va a mantener a tu bebé a salvo.
Ella sonrió, y Naruto vio la sonrisa más clara y cristalina que hubiera presenciado nunca. -Ni en los sueños más salvaje soñé con esto. Este amor es bueno, este amor es malo, pero este amor regresó de la muerte y aunque yo tuve que dejarlo ir libremente, él regresó a mí.
Hizo trampa, cometió algunos pequeños delitos, hizo que Neji se desviara de su camino de justicia y derecho, no obstante, la mujer murió a los ojos del Estado y la ley. Su nueva identidad era la de una huérfana que se había casado con un chef tonto que terminó trabajando en un hotel cocinando para los más ricos y poderosos de Konoha.
