El Fiscal del distrito Neji Hyūga ha visitado a Naruto para pedirle que le ayude en un caso de tortura y asesinato, puesto que necesitaba de un detective que conociera la ciudad y entendiera sus dinámicas. El joven policía, llevado por la desesperac...
Los personajes de Naruto no me pertenecen, sin embargo, la historia sí.
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Naruto observó a Itachi terminar de tratar la herida en su antebrazo a pesar de la oposición clara de la médica de la villa y le sonrió culpable cuando él buscó por sus ojos. Sasuke Uchiha no era nada como Itachi y aquello era extrañamente refrescante porque malo como era, "El Cuervo" no lo hacía por diversión como su hermanito y eso decía mucho del carácter de ambos hombres.
O simplemente era que su cerebro se había fundido de una vez por todas.
Obviamente no le importaba.
-Aunque no dije que meterte en problemas estaba prohibido, pensé que los evitarías a toda costa.
-Bueno, tu hermanito tiene la culpa.- Naruto se defendió y se recostó en Itachi respirando su aroma y fundiéndose con el agradable calor que se desprendía del cuerpo del hombre, -Evidentemente su actitud de mierda fue lo que lo empezó todo.
Itachi se rió, pero se dejó hacer cuando Naruto comenzó a besarle el cuello y alcanzó su boca, el aliento cálido del rubio le despertó los sentidos y devoró con fuerza aquellos labios pálidos que se le antojaban tanto a todas horas, no era lo que tenía planeado y ciertamente sabía que el detective solo estaba distrayendo su atención de una conversación importante, aún así, se dejó hacer porque quería sentirlo por completo.
Sus manos recorrieron la piel dorada de la espalda del otro hombre y se deleitó con los sonidos que salieron de la boca del rubio y la textura de su piel, no era importante en ese mismo instante pensar en nada más y le recostó en la cama sin dejar de deleitarse con su piel. Naruto no dijo nada cuando él le terminó de quitar la ropa y se zambulló en tocarle y saborear tanto como quisiera, pues ambos sabían que en ese instante no importaba castigarlo ni ser castigado; todo lo que quería era su placer y cuando el policía empezó a rogarle por su liberación, él sonrió complacido.
-Pero has sido un chico tan malo.- comentó, su lengua saboreando la piel de su muslo izquierdo, negándose a ir más allá y tocarle donde más sabía que lo necesitaba. -¿Por qué esto sería justo para ambos?
Naruto gimió de la pura insatisfacción y trató de alejarse, sin embargo, las manos poderosas de "El Cuervo" lo retuvieron en su lugar y le abrieron las piernas, sus tobillos descansaban en los hombros de Itachi y su cadera levantada le dio todo el acceso que necesitaba.
Los ojos azules y nublados por el placer se abrieron por completo cuando Itachi no tuvo reparos en penetrarlo de un solo golpe, el dolor que le quemó las entrañas le hizo maldecirlo como nunca había maldecido a nadie más en su vida y trató de zafarse de su agarre, pero no tenía la energía para ello; sus ojos llorosos se cerraron y trató de respirar, sus pulmones parecían atrofiados y solo atinó a gemir por dolor cuando él comenzó a moverse suavemente, sus manos acariciándole los muslos, casi tocándole el miembro solo para negarle el roce que necesitaba tanto.
