𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐆𝐑𝐎𝐖𝐒 || "El amor crecerá y las heridas sanarán"
Ella solo quería devuelta a las personas que perdieron en esta dura batalla, matar a Negan y estar todos felices, como era antes. Él había visto a toda su gente ser asesinada, pero aún...
Alden me miró, frunciendo su ceño luego de darse cuenta que estaba despierta, era de madrugada así que era muy extraño estarlo.
-¿Todo bien?- me pregunto.
Le mire, llevaba su cabello rubio y un poco más largo, alborotado y hecho un completo desastre, mientras mantenía sus ojos azabache abiertos a duras penas e intentaba verme a pesar de estarse quedando dormido.
Asentí levemente -No ha dejado de patear toda la noche, creo que está practicando boxeo o algo así.
Rió un poco, acomodándose para darme un medio abrazo, el cual correspondí.
-¿No te ibas a dormir?- pregunté cuando lo vi mirando el techo de la misma manera que yo.
Negó -Si tú no duermes, yo tampoco, somos como un equipo a partir de ahora.
Sonreí levemente -Te vas a quedar dormido- asegure.
Me miró indignado -¡No lo haré! Mírame, sigo despierto.
Cerró sus ojos mientras se quedaba dormido otra vez, le zarandee, haciendo que volviera a despertarse.
-Sigo despierto, solo descanso mis ojos- informó y reí levemente.
-Puedes dormirte si quieres.
-No, no- negó -¿Quieres que te prepare un té de manzanilla?
Asentí rápidamente como una niña pequeña, mientras él se apresuraba a salir de la cama, imite su acción, mirándolo cuando se encaminó frente a mi.
Primero beso mis labios y luego mi barriga de embarazada, haciéndome sonreír inevitablemente, Alden era muy tierno, mas ahora.
-Sin azúcar- recordé refiriéndome al té.
Asintió -¿Cómo te daría azúcar? Eso no podría hacerte dormir- aclaro con obviedad.
-Si pero, estás tan dormido que se te va a olvidar- me senté sobre la primera silla que encontré cerca.
-No se me va a olvidar.
-Alden, ese es el azúcar- informe cuando tomó en envase.
-Lo iba poner acá- contradijo guardando la cuchara con la que echaría el azúcar a la taza.
Reí un poco recargando mi mentón sobre la palma de mi mano, cerrando mis ojos por un segundo, según solo un segundo cuando me di cuenta ya tenía a Alden llevándome hasta la habitación.
-Sigo despierta- aclare adormilada.
-El té se cancela, vamos a dormir.
Refunfuñe dejándome caer con delicadeza hasta la cama y acurrucándome en el pecho del rubio cuando se acercó para abrazarme, colocando su mano sobre mi cintura y colocando su mentón sobre mi cabeza.
