𝙲𝙰𝙿𝙸𝚃𝚄𝙻𝙾 𝟷𝟻.

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𝙷𝚊𝚜𝚝𝚊 𝚗𝚞𝚗𝚌𝚊, 𝙻𝚎𝚟𝚒 𝙰𝚌𝚔𝚎𝚛𝚖𝚊𝚗.

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ʟᴇᴠɪ'ꜱ ᴘ.ᴏ.ᴠ

Observo minuciosamente el retrato donde Hanabi y yo estamos frente al Big-Ben, en Londres. Su brillante sonrisa hace que pase desapercibido el tono rojo de sus mejillas, resultado de estar a la intemperie una mañana donde el termómetro marcaba cinco grado bajo cero. 

— Adelante — indico al escuchar la puerta sin despegar los ojos de la fotografía.

— Farlan Church ha confirmado su primer depósito como socio de la editorial, ¿Le envío tu número del banco?

— No Jane, abriremos una cuenta exclusivamente para la empresa, ¿Puedes encargarte de eso? — respondo tomando mi teléfono. 

— Claro — dice haciendo anotaciones en su cuaderno — ¿Estás preocupado por algo? 

— Hanabi no responde mis llamadas desde la mañana, me pregunto si está bien. 

— Bueno, es una chica universitaria, ¿Tú tenías tiempo de atender la correspondencia a diario? 

Suspiro, Jane tiene razón, cuando estudiaba la universidad dejaba todas las cartas y mails para el fin de semana, aunque normalmente se trataba de invitaciones de mis compañeras o chicas de facultades vecinas, invitándome a salir y las leía demasiado tarde. 

— Cierto, me ocuparé de corregir estas notas, deben estar listas para mañana — resuelvo abriendo el portátil, en ese momento mi teléfono comienza a timbrar. 

— Te dejo, iré a hacer lo del banco — se despide Jane saliendo de la oficina cerrando la puerta tras sí. 

— Hali, disculpa, estuve como loco llamando desde el medio día, ¿Cómo estás? — contesto en seguida. 

— Lo siento, olvidé el móvil en el salón de edición, tuve suerte porque Marco lo encontró y lo trajo hasta mi dormitorio — el ruido de una envoltura se mezcla con su voz — hoy es su tercer mes de Kiki, los chicos y yo decidimos llevarle un pastel para festejar y encontré un atuendo adorable. 

— Suenas como una tía orgullosa — sonrío un poco al percatarme de su emoción, así es Hanabi Lufkin, encuentra fascinante todo lo relacionado a sus seres queridos — ¿Puedo pedirte que le lleves un regalo de mi parte? 

— Claro, pero, no sé si tendré tiempo de comprarlo, debo recoger el pastel. 

— ¿Qué opinas si yo lo pago? 

— No, no, es demasiado, todos nos cooperamos porque queríamos uno personalizado con figuritas de my little pony.

— 1,000 yenes ¿Es suficiente? 

— ¡Levi!

— ¿1500?

La escuché bufar bajito. 

— 1200, y contará como regalo de su primer año. 

— En realidad, espero que como regalo de aniversario le demos una amiga con quien jugar. 

— ¡Levi! — exclama y estoy casi seguro de que en este momento está completamente sonrojada — en ese caso deberá esperar dos años. 

Su respuesta me toma por sorpresa y escucho su risa resonando tras la bocina. 

Jaque mate

— Qué bueno que lo aclaras, así sé que tengo un año para buscar el anillo.

𝚀𝚞é𝚍𝚊𝚝𝚎 𝚊 𝚖𝚒 𝚕𝚊𝚍𝚘 | ʟᴇᴠɪ ᴀᴄᴋᴇʀᴍᴀɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora