La vida está llena de problemas, ella no sería la excepción. El llegaría a su vida problemática para darle la pizca de felicidad que ella necesito todo este tiempo, ambos son perfectos juntos como si el agua fluyera por la cascada más grande del mun...
Dando fin a ese recuerdo que me carcomía casi todas las noches, vi la hora, ya es un poco tarde, aún tengo la bebida en mi mano, aunque ya había terminado con ella. Me levanto del asiento, secando mis lágrimas con la manga de mi suéter, camino dirigiéndome al contenedor de basura más cercano, estiro mi mano para botarlo, antes de hacerlo decido ver lo que el Idiota escribió en el vaso.
"Husky".
¿A qué se debe ese nombre?, no entiendo el hecho del porqué lo escribió, decido no botarlo, me quedaré con él, iré a preguntarle en una oportunidad, ¿porque había puesto ese nombre?, yo recuerdo haberle dicho que mi nombre es Galicia.
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L. Dawson.
Qué día más aburrido, nadie viene a comprar estos milkshakes, de todas formas que bien que me pagan por horas, creo que mejor me pongo a ordenar estas decoraciones. Cogí una limpiándola, luego otra, tuve un problema, esta estaba con grietas y al pasar mi mano me hago un pequeño corte en el dedo.
— ¡Mierda! — siempre todo me sale mal, mi dedo no sangra, no tengo ni idea el porqué, me parecía bien así no debo intentar parar una sangre inexistente, pasando unos segundos, escuchó los claveles de la entrada.
Alguien ha entrado, no pueden ver que me he cortado la gente es muy odiosa, comienzan a quejarse por todo, además si lo hacen mi jefe va a matarme. Esa persona comienza a hablar con una voz un poco chillona.
— Disculpa, me gustaría pedir algo. — fingí no escucharla, debo sacar un vidrio de mi dedo. — Holaa, quiero pedir algo — insiste, su voz es graciosa, la escuchó suspirar. — ¡Qué gran servicio brinda este lugar! — ironiza, pienso que ya es momento de voltear.
Giro sobre mis talones — Espere, lo siento mucho es que un vidrio se clavó en mi dedo y tenía que sacar.... — subí la mirada y me di cuenta quien es, es la amargada del parque. — ¡Tuuu! — la señale intentando burlarme de ella.
Ella suspira enojada pero sigue mi juego, aunque en el fondo puedo notar lo confundida que está.
— ¿Yoo? —pregunta.
— ¡El café sin azúcar! — Digo para luego reír, ¡ella se enoja muy fácil!.
— ¡Tuu!, El idiota que se cae persiguiendo su perro. — Auch, es muy directa y muy sarcástica eso se nota.
— En mi defensa, el lugar estaba oscuro. — traté de defenderme, luego desviar la conversación intentando escribir cosas en la máquina.
— Seguramente — suspiro. — en fin quiero pedir algo — asiento para luego tomar su pedido.
— ¿Qué te gustaría tomar? — preguntó, con mi falsa sonrisa de protocolo, mis mejillas duelen al hacerlo.
— Dame un milkshake de fresa por favor. — busca dinero en sus bolsillos, ella es muy baja de estatura, me da risa verla.
