❝ C i n c u e n t a y t r e s ❞

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Cuando llegaron a Busan nada y a la vez todo había cambiado para JiMin.

A pesar de que el panorama seguía siendo el mismo, no lo sentía como un hogar. Se acostumbró fácilmente a Daegu, tanto que ahora Busan resultaba ser desconocido frente suyo, aparte ser de una cuna de recuerdos no muy gratos o que le hicieran sentir alegre u orgulloso.

Sin embargo, esa era su manada, donde había nacido y crecido. Era injusto no considerar aquel lugar como parte de su vida al menos; al igual que en todos los territorios de Corea del Sur —exceptuando a Daegu—, Busan estaba dividida en alrededor de seis a diez manadas distintas. JiMin pertenecía a una de las más grandes en Busan, y vivió allí desde que nació y hasta que estuvo con JungKook. El sentido de pertenencia no desaparecía, pero quería recordar sus raíces sin necesidad de deprimirse o recaer por culpa de la desaparición de su familia en su vida, o por los Jeon.

Por su parte, YoonGi estaba más distraído en mantener a ambos a salvo y ocultos. Durante una semana estuvo planificando aquello, y tenía una gran parte cubierta. Una casa alejada, bastante dentro del bosque, debería mantenerlos ocultos; además, no había anunciado su viaje a Busan ni a su propia gente. Sólo HoSeok, SeokJin y otro par más de personas lo sabían y sobre ellos recaía la obligación de encubrirlos.

Ellos fingirían que él y JiMin estaban ahí, sólo que muy ocupados y cansados como para ser vistos.

Incluso, debido a su necesidad de prevenir antes de lamentar, había realizado una pequeña prueba por más que JiMin le pidiera que no lo hiciera. Sólo trajo consigo prendas sencillas, como las que utilizaría un hombre promedio, sin nada de lujos ni ropas de alta costura. Increíblemente, la única reacción que consiguió fue la de un grupo de chicas que comenzaron a murmurar entre sí sobre "el hombre guapo que es idéntico al líder de Daegu" entre risas coquetas. Aparentemente, en esa pequeña y tranquila zona, no corrían peligro de ser identificados inmediatamente.

Afuera y en lugares estratégicos estaban instalados varios de sus centinelas, los que vigilaban por turnos la seguridad de la pareja. Quizás no lo reconocieron antes, pero el riesgo seguía siendo alto al ser obvio que los Jeon podrían identificarlos, lo habían visto y lo conocían, a él y mucho más a JiMin. Su lobo merodeaba inquieto, sin querer que su Omega saliera siquiera observar el jardín. YoonGi compartía el sentimiento, sin embargo, porque le preocupaba que encontraran a JiMin si llegaba a descuidarse. En cambio, su lobo, sólo era un posesivo celoso.

—No podemos estar aquí por mucho tiempo. Me gustaría que todo fuese más calmado, pero no podemos permitirnos tal cosa. —decía el Alfa, desempacando y colocando las cosas en su lugar. La habitación en la segunda planta no era tan grande y tenía sólo una pequeña ventana, eso hacía sentir a JiMin seguro de una extraña manera. —Lamento eso.

—No hay problema, lo entiendo. —JiMin curvó sus labios en una sonrisa ligera, con la intención de fingir estar con una pensamiento despreocupado y despejado. —Estaremos menos de un mes aquí, tengo una idea de cómo empezar a buscar. Está bien si no llegamos a saber qué sucedió con ellos al final, de todas formas.

—Descubriremos que sucedió con tu familia, no te desanimes. —le alentó, suspirando. Esperaba estar haciendo lo correcto. —Sé que solucionaremos esto, tarde o temprano.


• • •


JiMin reía mientras intentaba seguir el paso del inmenso lobo negro a través de aquel bosque que, aunque no se notase, era muy diferente a aquellos fríos de Daegu. Sólo se trataban de pequeñas diferencias que cambiaban por completo su visión.

YoonGi había cambiado con la excusa de querer desestresarse en su cuerpo lobuno, pero en realidad lo hizo por seguridad, más que nada.

Si estaba en su piel de lobo, sería más fácil atacar a una amenaza que atentara contra él o JiMin. Esa era la única medida de defensa que pudo ocurrírsele después de que el Omega le convenciera de explorar un poco sus alrededores, lógicamente, sin excederse de los límites que los centinelas de YoonGi cubrían.

(••𝖉𝖚𝖑𝖈𝖊••)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora