JiMin sabía que era indudablemente feliz ahora. No por ser alguien importante o por sus costosas vestimentas. Tampoco por los deliciosos banquetes, ni por los beneficios que traía la alta sociedad. Sin dudas, ese no era el motivo.
Las riquezas no valían nada y ni siquiera lo harían feliz si viviera encadenado a un sufrimiento constante. La diosa luna había sido generosa con JiMin, permitiéndole hallar un tesoro más grande que la fortuna material.
YoonGi fue el único que se preocupó en buscar cada pequeña pieza dispersade su corazón roto, uniendo esos pedazos juntos y sosteniéndolos para JiMin cuando él ya no se sentía capaz de hacerlo. JiMin amaba a su Alfa, y YoonGi amaba a su Omega. Esa conexión que los unía a ambos era mucho más valiosa que cualquier mansión, que cualquier joya o cualquier extravagante objeto exótico.
Además de ello, encontró buenas amistades. SeokJin, TaeHyung y él se hicieron bastante cercanos con el avance de los días; solían ir al pueblo y visitar los lugares hermosos del bosque, que ahora, lejos de verse aterrador, oscuro o escalofriante, era pacífico.
Muchas cosas buenas habían comenzado a suceder desde hace cuatro meses, como aquel anillo de brillante oro dorado que rodeaba su dedo anular. Daegu celebró el matrimonio entre su líder y su Omega Luna, entregando a sus gobernantes un montón de obsequios, además de felicitaciones y buenos deseos.
La boda fue llevada a cabo en el jardín de la mansión Min, por el simple hecho de que JiMin amaba estar allí. La decoración no fue un problema gracias a que el jardín etéreo era hogar de distintas especies de flores coloridas, árboles y arbustos bien cuidados, siendo eso suficiente para crear un hermoso panorama digno de una ensoñación.
Un enorme marco colgado a la pared de la sala principal los retrataba luego de la boda, ambos luciendo un par de deslumbrantes sonrisas sinceras en sus rostros. La dicha había sido casi palpable para los dos ese día, y JiMin se sintió afortunado de poder mantener aquel bonito recuerdo plasmado allí y en su memoria.
Min JiMin era reconocido como el Omega que Daegu admiraba por la amabilidad de su alma, por la fuerza de su valentía y por la humildad de su corazón. No era extraño verlo ir al pueblo, jugar animadamente con los niños y ayudar a las personas que más lo necesitaban. Después de todo cuidarla debía ser una de sus prioridades, aquella manada también le pertenecía.
No obstante, hace un mes no caminaba a través del pueblo que visitaba sin falta. No abandonaba la habitación de no ser necesario, obligándose a salir cuando él y YoonGi debían asistir a algún evento importante. El médico dijo que JiMin se sentiría mucho más a gusto en su habitación que en el exterior durante los últimos tres meses de gestación, así que no era una señal de alarma. Únicamente en su dormitorio la esencia de YoonGi prevalecía, aunque él no estuviese presente, y sólo el aroma del Alfa podía relajar al Omega y al inquieto cachorro que crecía en el vientre del mismo.
Esa noche JiMin decidió, con mucho pesar, salir de la habitación. Estaba aburrido y una conferencia de última ahora mantenía a YoonGi demasiado ocupado como para acompañarle. JiMin saludó a un sirviente, que se mostró un poco desconcertado por verlo allí. Sin embargo, realizó una profunda reverencia en muestra de su respeto hacia él sin cuestionar qué hacía despierto a esas horas.
El recorrido de JiMin no se extendió demasiado, puesto a que se dirigía hacia la habitación conjunta a la suya, la cual antes perteneció a HoSeok. Desde que abandonó el cargo de segundo al mando se trasladó a otra parte de la mansión junto a TaeHyung, en busca de privacidad y de proteger a su familia de los malos comentarios de otros. HoSeok cumplía como debía su papel, siendo el encargado durante los viajes de YoonGi, así que no hubo quejas al respecto.
Por otro lado, JiMin lucía dichoso siendo el primero de la guardia. MinHo indicó las grandes capacidades que JiMin poseía, relatando la forma en la que el Omega analizó la posición de cada centinela minuciosamente, evitando a la perfección, y para sorpresa de muchos, un ataque en las fronteras del territorio organizado por criminales que planeaban robar a las familias desprotegidas.
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(••𝖉𝖚𝖑𝖈𝖊••)
Fanfiction❝ ¿Quién dijo que, en su manada, vivir como una omega infértil seria cosa fácil...? ❞ JiMin fue comprometido como cualquier omega en una de las tantas manadas de Busan. pero a diferencia de cualquier omega, el no podía concebir. solo por esa su cuer...