—Un momento papá—Dije levantando la voz y Nate me dejó de nuevo en el suelo.
—No jodas que ese es tu padre—Susurró Nate.
—Sí, es mi padre y como te vea aquí dentro te va a reventar la cabeza, así que escóndete de una vez—Le dije empujándolo hacía el armario.
Nate se metió en el minúsculo armario y no pude evitar reír al ver que apenas cabía dentro.
Me vestí rápidamente y solté mi pelo haciendo que este dejara mis hondas sobre mis hombros. Seguidamente apagué la luz y salí.
—¿Te pasa algo?—Me preguntó mamá, la cual estaba rodeada por el brazo de mi padre.
—No, todo bien—Le dije y ella me miró de arriba abajo.
—Tienes una mancha aquí—Mojó su dedo con saliva y me lo pasó por la mejilla.
—Aggg mamá que asco—Dije apartándome.
Caminamos hasta la salida del recinto y al salir una multitud de flashes apuntaban hacía nosotros con impetú.
—Liam te enfrentarás esta semana a los Giants, ¿te ves preparado?—Dijo un periodista a la vez que le apuntaban con un micrófono pero mi padre no respondió, siguió caminando detrás de los agentes de seguridad que intentaban apartar a los periodistas.
—¿Cómo te sientes al ver a tu hija desfilar en uno de los mayores desfiles del estado?—Gritó otro desde el lado opuesto.
—¿Estáis de acuerdo con la relación de Travis Jones con vuestra hija?
Papá continuó ignorándolos mientras caminaba cogido de la cintura de mi madre y con su otro brazo me rodeaba el hombro. Al llegar al coche los tres nos montamos en la parte de atrás y al arrancar, los flashes y las fotos quedaron atrás.
—¿Estás con Travis?—Me preguntó mamá.
—Claro que no mamá—Le dije y ella suspiro aliviada.
—Daniela, nuestra hija no es tonta como para estar colada por uno de los Jones—Dijo Papá—Todos saben la mala fama que tienen.
—¿Mala fama?—Pregunté.
—Ya sabes lo que dice la prensa—Me dijo mamá—Su hijo el mayor está loco. Dicen que quemó el anterior instituto en el que estuvo antes de irse al internado y que desde entonces ha ido a peor.
—¿Por eso te cabreaste cuando me llevo a casa?—Le pregunté a mamá.
—No es buena gente Abby. Travis no tiene culpa de los desvaríos de su hermano, pero ese chico no es bueno.
El coche frenó lentamente y al mirar por la ventana, ya habíamos llegado a la casa de Sally.
—Pásatelo bien cariño—Dijo papá y me abrazó—Nos vemos la próxima semana—Ambos se iban a Nueva York, mamá por trabajo y mi padre por el partido con los Giants.
Me bajé del coche y me caminé hasta la entrada de la casa. Justo en la puerta me esperaba Travis, Landon y Sally.
—¡Ha sido un alucine!—Exclamó Sally y le sonreí.
—Gracias—Le di un abrazo y esta me lo devolvió.
—La fiesta ya ha empezado—Dijo Travis y entró a la casa.
Los demás entramos detrás de él y la verdad es que aquella casa estaba inundada de gente. Decenas de personas se abarrotaban en cada esquina, algunos jugando, otros bebiendo y otros simplemente emborrachándose.
—Vamos a por unas bebidas—Dijeron Travis y Landon y ambos salieron caminando hacía la cocina mientras hablaban animadamente.
—¿Jugamos a algo en lo que vienen?—Preguntó Sally y asentí caminamos alrededor del salón y vimos a un grupo que estaban jugando al yo nunca.—¿Quieres?—Me preguntó Sally.
—Porque no
Nos unimos al grupo que estaba jugando y segundos después llegaron Landon y Travis con nuestras bebidas.
—Es simple—Explicó una chica a mi lado—Alguien dice yo nunca he hecho tal cosa y la persona que si lo haya hecho bebe.—La chica sonrió.—Yo empiezo—Miró a su alrededor—Yo nunca he besado a nadie de este círculo.
Travis, Landon, Sally y yo dimos un sorbo a nuestra bebida, algunos más del círculo también bebieron.
—Yo nunca me he bañado desnudo en la playa—Varias personas bebieron.
—Yo nunca he tenido sueños eróticos con alguien de este círculo—Continúo la siguiente chica. Dentro de poco me tocaría a mi y aún no había planeado que decir.
Travis bebió del vaso y seguidamente rehuyó de mi mirada.
Varias personas hablaron, hasta que llegó el turno de Sally, justo antes de mi turno.
—Yo nunca me he enrollado con una persona de mi mismo sexo—Dijo Sally y bebió.
—Te toca Abby—Dijo Landon.
—Yo nunca he mentido en esta partida del yo nunca—Dije y todos rieron. Era lógica mi pregunta, ya que yo era la última en la ronda.
Algunas personas bebieron y la chica de mi lado anunció la persona que debería tirarse a la piscina. Los cuatro nos levantamos y nos sentamos en un sofá.
—Ey chicos, tenéis que venir—Dijo una voz masculina frente a nosotros—Arriba están haciendo un torneo de call of duty—Landon y Travis se levantaron y prácticamente salieron corriendo hacía el piso de arriba.
—Creo que a Travis le molas—Me dijo Sally en cuanto se fueron.
—Travis y yo solo somos amigos, y así será siempre—Le contesté a Sally.
—Nunca hay que cerrarse a nuevas experiencias—Me miró sonriendo.
—Y no me cierro, es que simplemente no lo veo más que como un amigo y no creo que lo consiga ver de otra forma—Le dije y ella cogió nuestros vasos de encima de la mesa.
—Por una vida llena de tíos—Dijo alzando su vaso para brindar.
—Por una vida llena de tíos—Brindé y seguidamente bebí—¿Tú no estás con Landon?—Le dije riendo.
—Sí, pero eso no implica que me vea durante toda mi vida con él—Contestó.—Miró a nuestro alrededor y me susurró—Vamos a jugar a un juego—Seguidamente se levantó y llamó la atención de varias personas que estaban cerca de nosotras en el salón.
La gente se agolpó alrededor de los sillones esperando a que Sally dijera algo y yo no pude evitar mirar a todos y pensar que a pesar de que estábamos en el mismo instituto, no conocía el nombre de más de la mitad de esa sala.
—Juguemos a 7 minutos en el paraíso—Exclamó Sally, algunas personas se quejaron y se fueron, pero la gran mayoría se sentaron alrededor de la mesa en los sofás.—Las reglas son simples, se girará dos veces la botella y las dos personas que caigan frente a la boca de esta tendrán sus siete minutos en el armario, sin que nadie los moleste. Luego podrán seguir jugando o subir a alguna habitación.—Sally sonrió—Yo giraré la botella—La botella empezó a girar sobre si misma y cayó sobre una chica pelirroja. Volvió a girar y cayó sobre otra chica que se encontraba frente a mi.
—La primera parejita de la noche—Dijo sonriendo Sally
Ambas entraron al armario y siete minutos exactos después, Sally tocó la puerta y estas salieron con los pelos algo revueltos y la pelirroja traía un chupetón en su escote.
—Siguiente—Dijo Sally y giró la botella. Tras un par de vueltas, Sally paró la botella frente a mi.—Vaya, que casualidad.
...
Ig:_lina.sunn_
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Si todo lo que soñáramos fuera realidad (Completa)
Romance-Por favor-Susurré y él me miró mordiéndose el labio. -A la mierda-Tiró el vestido y me agarró por las caderas, levantándome fácilmente en el aire. Sus ojos recorrieron los míos segundos antes de que me apoyara contra la pared y con uno de sus dedos...