Si todo lo que soñáramos fuera realidad (Completa)

Capítulo 4

Desistí de llamar a mis padres una hora después, cuando mi teléfono tuvo la excelente idea de que era hora de quedarse sin batería en el momento menos oportuno.

A pesar de que estaba algo iluminado no reconocía bien por donde me estaba moviendo, si, había pasado varias veces por esta zona, pero nunca caminando y menos a las 11 de la noche. Si lo que decía el google maps era cierto, me quedaba aún una hora caminando y sinceramente ya estaba agotada y los zapatos me estaban haciendo daño.

Me paré un momento en un banco frente a una casa y miré el cielo estrellado. La verdad que se había quedado una buena noche después de todo.

Justo cuando iba a levantarme y a seguir caminando un todoterreno negro con los cristales tintados se paró frente a mi.

—¿Qué haces aquí?—Gracias a Dios era Nate y la verdad no sabía si eso era bueno o era malo—¿Me estás oyendo?—Dijo a la vez que se bajó del coche.

—Tu hermano me dejó tirada en medio de la carretera—Le dije y se quedó frente a mi mirándome de forma incómoda.

—Sube al coche—Dijo, bueno más bien me ordenó.

—Creo que no es lo mejor—Le contesté, a pesar de lo poco que conocía a Nate, sabía que era a un tío que le gustaba vacilar y la cara que tenía en ese momento era de todo menos de vacilón.

—Estás herida, sube al coche—Dijo de nuevo.

—¿Herida?—Pregunté y señaló a mi cara, pasé mi mano por mi mejilla y toqué un poco de sangre seca.

—¿Vamos?—Dijo nuevamente cuando se subió al coche y asentí.

—Gracias—Le dije cuando me subí a la parte delantera de su todoterreno.

—Mi hermano es un gilipollas—Dijo él—Adivino como te has hecho ese corte, frenó de golpe con el coche y te golpeaste contra algo.

—La verdad es que no lo sé—Le contesté—Estaba muy cabreado contigo y empezó a conducir como un loco—Empecé a contarle mientras conducía hacía mi casa—Le pedí que parará y se tranquilizara. Pegó un frenazo y me hizo bajarme del coche.

—Lo que te digo, un completo capullo—Contestó él—Menos mal que Delia vive por aquí y te he encontrado.

—Pues si—Susurré

Ambos nos quedamos en un silencio incómodo mientras conducía. El ambiente estaba algo cargado y no sé porque su presencia me hacía sentir algo incómoda.

—Se la va a llevar cuando llegue a casa—Farfulló Nate.

—No importa en serio

—¿Cómo se le ocurre dejarte en medio de una carretera?

—Estaba cabreado, supongo que no pensaría con claridad—Contesté yo.

—Me importa una mierda—Dijo Nate—Ese crío de mierda no entiende nada.

Mientras Nate maldecía a su hermano yo me mantuve en silencio mientras miraba por la ventanilla. Un rato después frenó frente la puerta de mi casa.

—Gracias—Le dije 

—Perdona al tonto de mi hermano—Me pidió—Te ha tratado como una basura esta noche, primero lo del café y ahora esto. De verdad que me siento fatal.

—No importa, Travis es así—Susurré—Gracias por traerme

—Adiós Abby—Susurró y cerré la puerta del coche, seguidamente abrí la puerta de la finca y subí hasta mi casa. 

Al abrir la puerta mamá y papá me esperaban en la entrada.

—Joder Abby, nos tenías super preocupados—Dijo mamá abrazándome.

—Me quedé sin batería—Le dije—Nate me trajo hasta casa.

—¿Nate?—Preguntaron los dos a la vez.

—El hermano de Travis—Contesté.

—Ese chico es un problemático Abby—Dijo mamá—No quiero verte cerca de él—Acarició mi cara—¿¡Dios que te ha pasado!?

—Me he golpeado—Le dije y ella se sorprendió.

—Tienes el desfile en cinco días Abby—Dijo abrazándome—¿No habrá sido Nate no?

—No mamá—Le dije—Tengo sueño, voy a mi cuarto.

Les di las buenas noches y seguidamente subí hasta mi habitación. Me quité los zapatos y me desplomé sobre la cama.

...

Me levanté por culpa del odioso despertador y me metí en el baño para asearme antes de ir a clase.

Como todas las mañanas Landon me recogió en su coche junto a Sally, pero esta vez Travis no estaba con ellos.

—Travis no ha aparecido—Dijo Landon

—Anoche me dejó tirada en la carretera—Les dije y Sally me miró sorprendida—Nate me recogió y me trajo hasta casa.

—¿De verdad hizo eso?—Preguntó Landon mientras conducía, miró por el retrovisor y asentí—Es un capullo

—Se cabreó mucho con Nate por contaros lo del beso—Le dije—Creo que le está sentando mal que su hermano haya vuelto del internado

—Joder, es que no nos lo esperábamos—Dijo Landon—Al menos a mi me molestó que no nos lo contarais a nosotros sino a Nate.

—Fue una tontería—Les contesté—Travis estaba confundido y me besó y Nate lo vio, ya está.

Cambiamos de tema de conversación hasta llegar al instituto, allí nos separamos ya que a primera hora a cada uno le tocaba una materia distinta. A mi me tocaba técnicas de laboratorio, una asignatura que si bien me parecía entretenida, el profesor me parecía lo peor que te podía pasar en la vida.

Me senté en mi asiento de siempre y esperé a que el profesor iniciara la clase. Diez minutos después de que la clase empezara, Nate entró por la puerta. 

—Buenos días profesor Loren—Dijo riéndose Nate

—Es el segundo año que repites esta asignatura, podrías aprobarla de una vez—Dijo con desdén el profesor—Anda, siéntate al lado de la señorita Jhonson.

—Si tu no me la apruebas, va a estar difícil salir de esta clase—Le dijo guiñándole el ojo. Seguidamente se sentó a mi lado—Hola Abby—Me susurró

Al finalizar la clase, Nate se quedó a mi lado mientras recogía mis cosas.

—¿Qué haces?—Le pregunté

—Delia me dijo que no fuera tan antipático contigo—Dijo—Y eso trato de hacer

—Me da igual si eres antipático conmigo Nate—Le contesté y él rio.

—Pues fíjate que ahora quiero ser simpático contigo, ven—Dijo mientras rodeaba mi hombro con su brazo y salíamos del instituto.

Dios mío que vergüenza, todos nos estaban mirando y no pasó desapercibido que Travis nos había visto.

—¿Qué haces imbécil?—Le espetó Travis a Nate

—Te sorprenderá saber que es mi nueva amiga—Dijo Nate

—Apártate de ella Nate

—¿Acaso no fuiste tu quien la dejó botada en la carretera?—Dijo Nate con su habitual sonrisa cínica—Ahora si nos disculpas vamos a estudiar técnicas de laboratorio juntos—Travis miró a su hermano con ganas de matarlo, pero no le dijo nada porque literalmente su hermano tenía razón. Él me había dejado tirada y no había disculpa que valiera para la forma en la que me había tratado la noche anterior. 

Ig:_lina.sunn_