Si todo lo que soñáramos fuera realidad (Completa)

Capítulo 36

*Narra Abby*

—¿Eso es mi diario?—Le pregunté a Tyler arrebatándoselo de las manos. Oh dios, no podía ser.

El diario donde había escrito durante tantos años, donde estaba prácticamente toda mi vida, cosas que simplemente no quería recordar, estaba entre las manos de Tyler. 

—Que mierda—Espeté histérica. Aquella libreta escondía tantas cosas...

Miré a Nate durante unos segundos y entonces todo empezó a cuadrar, todo se estructuró en mi mente y me ericé por completo. Él sabía todas esas cosas sobre mi, porque había leído mi diario.

—Te lo puedo explicar—Susurró dejando las llaves sobre la mesa. Lo miré.

—¿Todo este tiempo lo has tenido y no me habías dicho nada?—Le espeté—Vete a la mierda.

Recordé la última vez que lo había visto, lo había perdido una noche que me había quedado en casa de Travis, hace tanto tiempo, que ni si quiera me acordaba de él. Poco después Nate se fue al internado y nunca más pensé en esas páginas sin sentido.

—Abby, tiene una explicación—Susurró Nate

—¿Al menos puedo terminarlo?—Dijo Tyler—Estaba interesante

Di un golpe en el sillón.

—¿De qué coño vais?—Espeté me sentía tan incómoda, tan desnuda, ellos habían leído cosas muy íntimas de mi vida y yo no tenía ni idea.

—Lo encontré en el suelo de mi casa—Contestó Nate—No sabía que era tuyo hasta volver del internado, cuando te vi por primera vez y Travis me dijo tu nombre

—No está bien leer las cosas de los demás joder—espeté girándome hacía la puerta.

—No te vayas—Susurró

—Joder que si me voy—Dije negando con la cabeza—Esto no debería de haber ocurrido, tendría que haberle hecho caso a mis padres.

—Abby—Susurró Nate

...

Mi padre me recogió sin preguntar mucho acerca de que había pasado. Había salido del evento, únicamente para llevarme a casa. Me abracé a la libreta de cuero color rosa. Habían leído con lujos de detalles toda mi vida. Desde mi primer beso, hasta el momento en el que quise acabar con mi vida. Joder.

Miré por la ventanilla en silencio. Me sentía realmente mal. Sabía que Nate ocultaba algo, era imposible que supiera todo aquello sin conocerme, eso no lo conocía nadie. Supongo que ya sé porqué lo sabía. Las manos me estaban empezando a temblar y los ojos a cristalizar. Pero me había prometido no llorar, al menos no en ese momento. 

—¿Va todo bien?—Preguntó papá cuando frenó en el portón de casa

Asentí con la cabeza y él me miró con cuidado. Nada iba bien, no en ese momento. 

Él había traicionado por completo mi confianza. Había leído mis secretos, mis sueños, todas mis decepciones amorosas, había visto toda mi vida entre las páginas mal escritas de un diario y no me había dicho nada. 

Nate, la única persona en la que sentía que podía confiar, él. Me había traicionado. 

Me bajé del coche y al cerrar la puerta principal, me dejé caer en el suelo.

...

*Narra Nate*

—Joder Tyler—Le grité—¿Qué coño hacías con eso?

Tyler me miró y levantó los brazos.

—Lo vi por ahí—Dijo—Y recordé que en el internado no te despegabas de él y me dio curiosidad

—Acabas de joderlo ¡Todo!—Le espeté y me empecé a peinar el pelo. Esto no podía estar pasando. Abby se había ido. 

—Lo robaste tú—Dijo él—Ahora tendré yo la culpa de las cosas que tú haces. 

—¡Lo encontré en el cuarto de Travis!—Le espeté—Fue hace mucho tiempo, no pensé que lo fuera a encontrar. 

—¿Y por qué no lo quemaste cuando papá te amenazó?—Preguntó Tyler levantándose. 

—¿Perdona?—Le pregunté—¡¿Qué coño quieres decir con eso Tyler?!

—Papá me lo contó—Soltó sin más—No quisiste vender a tu novia, muy bien, pero ¿por qué no lo destruiste?

—No sé que coño estás insinuando—Le espeté—Pero no sigas por ese puto camino. 

—¿Lo venderías a la prensa si las cosas con Abby hubieran salido mal?—Dijo él y casi me vuelvo completamente loco. ¡Cómo podía tan si quiera pensar en eso!

—Te estás equivocando conmigo Tyler—Le contesté 

—Nate, mi hermano, el que yo conozco—Dijo él—No hubiera dudado en reventarle la vida a esa chica. Y con lo que había ahí...

—Yo no soy así Ty—Le espeté—Tú eres así, yo no, no te confundas. 

—Solo digo que...—No aguanté más la rabia que estaba cumulando con esta conversación y me abalancé contra él. Tyler sólo se limitó a sonreír mientras le daba un puñetazo tras otro. Su sonrisa ensangrentada, daba repelús.

—Ahí esta mi hermanito—Dijo el sonriendo. 

...