My sweet cupcake (Sope)

Injured Children

Hoseok llegó a casa, se cambió de ropa y fue a ducharse de nuevo, después de eso fue a su sofá con el folleto en mano.

Recordó al joven que se lo había entregado aquella tarde.

"que chico tan raro, aparte de verme extraño me trató sin una pizca de tacto" "se creerá el centro del mundo supongo"

Abrió sin ganas aquel folleto, era una guía por los hoteles más prestigiosos de la ciudad; los servicios que brindaba, y el tipo de habitaciones que tenía.

—acaso quiere que me hospede en uno de esos? Dijo riendo de forma confundida.

Su estado de ánimo mejoró al seguir viendo los hoteles y sus servicios.

—supongo que se equivocó, pero me gustan los lugares que ofrece, Hoseok se divertía viendo todo aquello —supongo que ha de ser un vendedor de agencia de viajes.

Sin darse cuenta se quedó dormido con el folleto abierto en sus manos, esa noche soñó con un viaje de relajación en una playa lejana.

La alarma sonó como de costumbre, Hoseok despertó en su sofá, sorprendido se sentó; un dolor de cuello le atacó.

—¿pero?... Dijo al darse cuenta que había dormido bien pero en el lugar equivocado.

Se preparó y marchó al trabajo.

Cómo era costumbre, Jeon Jungkook sabía que cada vez que Hoseok iba a ver a su madre pasaba varios días deprimido, así que aquella mañana decidió llevarle una sorpresa.

—¡Buenos días jefe Jung! Dijo sonriente al verlo llegar.

—¡Buenos días pequeño! Has venido temprano, dijo con su enorme sonrisa.

Ambos entraron y dieron comienzo a sus tareas.

—¿cómo te sientes? ¿Cómo está tu madre? Preguntó Jeon.

—ayer al volver del hospital vine a refugiarme aquí, vine a llorar en silencio, no quería ir a casa pero algo ocurrió. Un joven entró porque olvidé cerrar con llave.

Hoseok sonrió  confundido,
—dejó un folleto de hoteles, no dijo nada más, solo que pasaría hoy; lo extraño de todo es que me quedé viendo todo el folleto por la noche quedándome dormido en el sofá hasta hoy.

Jeon observó y escuchó con atención.

—hay algo que me sorprende más a mi, dijo.

—¿que cosa? Preguntó Hoseok con duda y expectante.

—de todo lo que me dijiste, el folleto se volvió el tema de conversación; dejaste todo lo de tu madre por un lado.

Hoseok se quedó pensativo, le dolía lo de su madre, eso no podía negarlo, la tristeza y angustia estaban ahí, es solo que ver las fotos de aquel folleto le habían distraído por completo.

Después de aquello, Jeon le dijo lo que siempre decía cuando Hoseok estaba en crisis.

—sabes que verte sonreír de forma real es lo que mas espero, así que puedes llorar lo que quieras pero detente en un momento; me agrada que algo te halla distraído y te sientas tranquilo.

Hoseok se sintió conmovido, después de eso trabajaron con más energía.

Casi llegado el medio día, la puerta de la pastelería se abrió dejando entrar a dos hombres de trajes elegantes.

Jeon saludó alegremente, sin embargo su sonrisa se desvaneció al escuchar al hombre frente a él.

—busco al propietario, dile que he venido a hablarle.