CÓDIGO: F.O.B.I.A. 《SONADOW/SHADONIC》🔞

Capítulo 26.

El inicio de un matrimonio aprueba de todo.

"La paz consiste en vivir el momento"
A.N
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Durante un rato se quedó en silencio, ella no lo presiona más, solo se mantiene curiosa a lo que podría continuar diciendo. No pide intervención y está vez no hay documentos que la auxilien, solo una libreta, su, libreta.

—No me mal entienda... él..., yo le pertenecía... esa noche me poseyó de muchas maneras... yo... nunca se lo pedí, jamás..., siempre se tomaba su tiempo para hacerme sentirlo…
—¿Su... tiempo? —preguntó con miedo.
Sonic asiente—, para... hacerme entender que era suyo... me acostumbre a dejarlo... tenerme... y aunque quería negarle a mi cuerpo ese poder..., no lo quería... nunca...
—¿Por qué dejaste de resistirte? —pregunta Blaze, mirando como un ave un trozo de miga.
Sonic sólo subió y bajó los hombros, buscando no responder a ello.
—¿Te lastimó mucho esa noche?
—Eso era lo raro en él... pocas... muy pocas veces —corrige— me llego a tratar mal cuando... estaba en su cama…
—¿Era amable?
—... tampoco... diría eso... —replicó, jugueteando con el cierre de su chamarra.— Era esperanzador…
—¿Puedes explicarlo?
—... si yo me portaba bien, teníamos... él..  era gentil, me dejaba dormir y me daba privilegios... pero, las veces que desobedecía, me encerraba en el sótano y... llamaba a otros…
—<<Otros>>— repite—, ¿los identificas?
Negó—, llevaba siempre una venda, no podía verlos... nada... lo siento...
—Está bien —contesta, con una sonrisa que lo relaja, y ella anota todo eso en una pequeña libreta cubierta debajo de su mano derecha—, mencionaste algo de privilegios, ¿cómo cuáles?

Sonic se aclara la garganta, y suspira por recordar cada uno. Pequeños premios en realidad.
—Comida... una vez a la semana, algo, lo que sea, que no fuera papilla o... pan... —contesta y rasca sus púas un poco—, me dejo deambular por la casa... e... incluso... me... dio... Un pantalón...

Ella anotó, y volvió la mirada a él—, ¿cómo lograste salir?
—... llame por teléfono... —Contestó y con un tono tan sarcástico, casi logra sonreír—, treinta minutos... eso fue lo que tuve que tardar...

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Sonic casi nunca podía mentirle, hacerlo significaba un día en el sótano, y otro día más siendo maltratado. Aprendió, y ello le brindaba algo, agradeciendo por eso.
Esta vez estaba en la sala, sentado en el piso leyendo otro libro más de aquella pequeña biblioteca.

El chico había aprendido a que debía levantantarse, darse un baño, ponerse ropa nueva y subir a tener sexo cuando se lo pedían. Pero eso le enseñaba, obsesivo al final del día.
—¿Qué lees está vez? —pregunta aquel chacal mirándolo desde detrás, recargado en la entrada de la cocina.
—<<Flores en la tormenta.>>
—¿Te gusta?
—... sí, supongo. Tienes muchos libros para leer... así que puedo escoger.
Contestó, el muchacho tomó lugar delante suyo, descansando, así que Sonic aprovechó y fue a tomar asiento a lado suyo.
—... tú... ¿Podrías ayudarme con ese otro? —señala a uno de los volúmenes más alejados del suelo—, me he terminado este, y quiero leer algo nuevo... por favor…
—Claro. Será tu próximo obsequio.

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—Espera, ¿por qué tiene que ver esto con una llamada?
Interrumpe Blaze, dando un trago final al café
—... Él siempre llevaba un teléfono. Siempre lo escuchaba hablar o mandar fotografías mías.
—¿Y qué hiciste?
—Lo golpeé, tenía un jarrón que me gustaba, y lo destroce para tomarlo.
—¿Lo conseguiste?
Asintió. —Pero, a tipos más grandes, más grande debe ser el golpe... solo tenía unos segundos antes de que pudiera levantarse bien...
—Sonic, llamaste, la policía llegó y tú saliste caminando con la cara herida junto a algunos cortes…
—Eso..., trate de salir... pero había una cerradura especial, bus... busqué en su ropa pero no había nada, así que tuve que correr. Tiene las fotos del interior... fue agresivo…
—¿Te hizo tener sexo de nuevo?
Negó—, lo hice enojar... así que tenía que <<eliminar>> el archivo expiatorio...
Se burló, y dejó de jugar con sus manos, recargandose en la silla.
—Tú…
—... Fue difícil... pero hicieron bien su trabajo... estoy aquí.
Alentó, pero Blaze se siente frustrada de verlo en ese estado, o al menos en el primero, cuando llegó lo vio sangrando, con cortes, se desmayó cuando lo tuvo en brazos, creía que no obtendría nada o que no sobreviviría. Pero ahora, delante suyo era diferente el muchacho.
—Sonic…
—No hay más... él abusó de mí..., mí cuerpo reaccionaba a él... me traicionaba cada que me... me tocaba y se enterraba en mí... me volví una mascota…
—Oye. No eres eso —expresó ella—, no eres una mascota. Eres Sonic the Hedgehog, eso es lo que debe importarte.
Asintió, pero no se siente seguro de sus palabras de ella, está cansado, incluso mareado por el tiempo que lleva dentro.
—... mí anillo…
—Claro, te lo pensaba entregar hoy. Aquí lo tengo —ella muestra una pequeña bolsita con la joya dentro, dejándola en el centro, Sonic la tomó  y no espero a sacarla, aunque sus manos tiemblan al querer ponerlo. Blaze lo detiene, le pide que espere a salir y acepta hacerlo.

Shadow no podía estarse quieto, por un lado tenía al ser que lastimó a su amado, y por otro, estaba Sonic, en una habitación dónde él sentía que lo había entregado. Espero, y ver a Sonic salir acompañado de Blaze le hizo sentir alivio, tomando a su pequeño en brazos.
—Sonic, pensé que ibas a necesitar algo, estaba preocupado…
—Está bien, agente Shadow. Ah, y oye —llamó, mostrando el anillo en la bolsita, Shadow lo ve, toma con cuidado la joya y trata de evitarlo, pero sonríe al tenerla en las manos. Mira al chico, le tomó la mano izquierda, y con cuidado, deslizó la joya que por el momento le quedaba un poco más grande.

—Ven, vámonos. Vamos a casa... —Shadow le pasó por los hombros su abrigo, cerrando los botones del centro para que no se le llegará a caer. Aún tiembla, lo tortura físicamente el verlo.
—Shadow, los mantendré informados.
—Sí..., ¿nos vamos?
Sonic asintió, tomando su mano en reflejo. Pequeña y cubierta por tantas prendas, luce adorable; caminando juntos para irse juntos a casa, la que ambos tenían y compartían.
Los dos, de nuevo en aquel auto, buscando respuestas que no dan o preguntas que no llegan a los oídos opuestos.

—Sonic, ¿Necesitas algo? —pregunta, mirando al muchacho que sólo ve la ventana del auto. Sonic, trata de no llenarse de los recuerdos, pero empieza a tener flashbacks, se acelera demasiado antes de querer llorar y con las mismas arcadas que alguna vez logró controlar.
Descontrolandose en la parte trasera del auto, socorrido por Shadow.
Su memoria era ahora lo que más lo torturaba, no lo quería más.

Las dos veces que fue. Las dos veces que tuvo, qué, recordar todo lo que sufrió.

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