Lily sentía su pecho latir con ímpetu.
Algo había pasado.
Por su mente pasaban las dos personas más importantes de los últimos días.
Winona, su madre.
Y Joseph, el chico del que se había enamorado.
Sólo quería que ambos estuvieran bien.
Necesitaba saber que todo estaba bien.
Finalmente llegaron al pasillo y Lily soltó un jadeo.
—¡Joe! Dime qué mierda ocurre...— Joe observaba a Lily y negaba.
—N-No pude...no pude, Lily...
—¿Qué mierda no pudiste hacer? — Lily yacía desesperada.
—No pude salvarla, Lily...— En ese instante el mundo de Lily cayó a pedazos.
Mamá...
—N-no...dime que es una broma...n-no...—La voz de Lily se entrecortó.
Joe negó y sintió sus ojos picar.
Un grito desgarrador resonó por todo el pasillo.
Fue Lily.
La castaña se golpeaba con sus puños cerrados mientras lloraba.
La había perdido para siempre.
—¡Mamá, joder! — Lily gritaba, negaba una y otra vez.
En ese instante estaba viviendo una jodida pesadilla.
—L-Lily...— Murmuró Joe mientras se agachaba hasta ella.
Lily en ese instante lo empujó y comenzó a darle golpes en el pecho.
—¡D-déjame Joe! ¡Ella no está! ¡Demonios, te pedí que me ayudaras, Joe! ¡L-la perdí para siempre — Lily no dejaba de llorar.
Joe no sabía qué hacer, intentaba calmarla pero era imposible.
Lily se zafó de su agarre y se levantó para así dirigirse rápidamente a la habitación 36.
Al entrar, soltó un gemido.
Una sábana blanca tapaba el cuerpo inerte de su madre.
Aquella imagen era dolorosa y Lily jamás la olvidaría.
La castaña de un momento a otro quitó la sábana que cubría de pies a cabeza a su madre y comenzó a llorar nuevamente.
—M-mamá...qué te han hecho mamá...— Lily se lanzó a los brazos de su madre.
Lloraba con ímpetu.
Gritaba sin poder detenerse.
Su pecho dolía de mil maneras.
Lily negaba una y otra vez.
—N-no pude salvarte mamá, n-no pude hacerlo...— Lily se aferró a su madre cuando sintió que los médicos llegaban hasta allí.
—Lily necesitamos retirar el cuerpo...— Murmuró Amelia.
En ese instante Lily comenzó a gritar.
—¡Déjenme con ella! ¡No puedo dejarla sola otra vez!
Lily se aferraba a su madre con fuerza, en ese instante llegó Joe y Mark intentando sacar a la castaña de los brazos de Winona.
—¡Lily necesitamos llevarla!
—N-no, no, no — Lily mordía su labio ínfimo con fuerza y cerraba sus ojos — Mamá, perdóname, debí cuidarte más...perdóname por dejarte sola, p-por favor abre tus ojos y dime que todo va a estar bien, que todo va a seguir como antes...mamá no puedo seguir si tú no estás aquí, por favor regresa...— La castaña le murmuraba una y otra vez a Winona, pero ya era demasiado tarde.
ESTÁS LEYENDO
7 » joseph quinn
Fanfiction"-El día en que ese árbol deje de florecer, será el día en el que yo ya no estaré aquí. -Mamá... -Hija...ese cerezo siempre vivirá." Lily es una chica de 22 años que ha pasado toda su vida en el hospital. Constantemente ve a su madre con una delica...