iii.

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—La encontré en la habitación, ¿puedes creerlo Keery?

Lily únicamente rodó los ojos.

—Ya te dije que buscaba mis fotografías.

Charlie frunció el ceño.

—¿Por qué no lo pediste? No comprendo, Lily. Únicamente siento que te estás involucrando demasiado con él.— Dio un sorbo a su café mientras buscaba la mirada de Keery.

Sin embargo, Keery parecía no importarle.

—No me estoy involucrando con nadie, no digas tonterías.

Lily comenzaba a sentir su respiración aumentar.

Detestaba las discusiones.

Habían ocasiones en las que quería arrancarle los jodidos cabellos de la cabeza de Charlie.

—Claro, por eso parecías tan interesada en saber quién era.

—Bueno, basta los dos. No los entiendo, parecen dos niños pequeños discutiendo.— Joe ya se había hartado de la situación.

Charlie por su parte únicamente rodó los ojos y se puso de pie para así sacar un cigarrillo.

—Iré a fumar, pero que quede claro Lily, esto no ha terminado...— Charlie le hizo una seña con sus dedos mientras apuntaba a sus ojos.

Lily por su parte levantó su mano izquierda sacándole así el dedo del medio.

Joe soltó una carcajada.

—Ahora sí, dime la verdad, ¿Por qué te interesa tanto ese chico?— Preguntó Joe al cabo de unos segundos.

Lily dio un sorbo a su café y suspiró.

—Nadie a venido a visitarlo... siento que está solo, y sé que no debería entrometerme pero...

—Pero eres Lily Ryder, y siempre buscarás entrometerte de alguna u otra forma...—Completó Joe mientras sonreía.

Tenía razón. Pensó Lily.

—¿Crees que él despierte?— Preguntó Lily al cabo de unos segundos, jugaba con la cuchara que yacía en su vaso de café mientras observaba el árbol de cerezos que se divisaba a la distancia.

Joe suspiró.

—No lo sé, su situación es compleja, incluso más compleja de lo que tú te puedas imaginar — Joe observó el rostro de desilusión de su mejor amiga y bajó su mirada— supongo que, eso dependerá de él.

—¿Cómo dices?

—Escucha, no sé si eso sea real pero, en la salud siempre se ha dicho que depende del paciente si decide quedarse o no. Exactamente eso ocurre con él, tal vez se encuentra entre la vida y la muerte, sólo tiene que elegir qué camino tomar.

Lily estaba pasmada.

¿Eso existía? Sólo lo había visto en las películas y lo encontraba extraño.

Es decir, ¿puedes elegir si vivir o morir?

En ese momento pensó en Joseph, tumbado en la camilla y conectado a una máquina.

¿Él querría volver?

Negó por un instante.

Si ella fuese él, probablemente decidiría irse.

Nadie lo visitó.

Habían pasado casi 34 horas de su accidente y nadie había reclamado por él.

Lily por primera vez, pudo entender la situación por la que él estaba pasando.

7 » joseph quinnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora