FLASHBACK.
— Gatito! Ven...
Como ya se había acostumbrado, Zhan le habría campo en su cama cada vez que iba a dormir. Y aún así no lo hiciera... Yibo empezaba a morderle los pies.
Como muchos de los otros dias... Zhan empezó a soñar con el omega. Sólo que ahora tenía un rostro... Lo que hacía el sueño húmedo aún peor.
La mirada del omega era profunda y sus ojos eran oscuros y afilados... Para cuando el alfa abrió los ojos el gatito en su forma de omega estaba jadeando sobre el, frotándose con su piel hirviendo tanto que sus mejillas se ponían rosadas...
— Alfa! Hagamos cachorros! Quiero cachorros.
Cuando el omega abrió la boca y movió su pelvis hacia adelante atrapando el falo grueso del alfa entre sus nalgas, Zhan gruñó con desespero antes de enterrar sus manos en la cintura del omega y coordinar el sensual movimiento sobre el...
Yibo se movía hacia adelante y hacia atrás sin encajar el objeto en su cuerpo, pero el líquido que segregaba desde su agujero lubricaba el falo que se restregaba contra el.
— Mnggg... Más... — El se sostuvo de los antebrazos del alfa apretandolos tan fuerte hasta casi enterrar su uñas en ellos. — Alfa... Damelo, ¿Si?
— Todavía no. — El aroma de ambos se combinaba en el ambiente. Yibo se sentía mareado y sus entrañas se retorcían por el vacío en su interior. Cada que el glande presionaba casi acariciando su entrada... Su cuero cabelludo cosquilleaba... Hasta que Xiao Zhan entró en el.
El omega soltó un grito el cual fue sellado con la mano del alfa que presionó contra sus labios mordidos por ansiedad de ser tomado.
— Shh...
— Shhh Omeguita. Si haces mucho ruido los despertarás.
Lo que menos quería el alfa, es que su omega volviera a su forma felina. No cuando empezaba a rematar con los movimientos de su pelvis.
Los ojos del omega se abrieron de par en par... El alfa era muy grande...
Negó un par de veces... mientras el alfa se hundía en su interior... Su agujero estirado hasta el máximo cambio de un color rosado a uno rojizo por el esfuerzo.
Solo para lograr que el alfa quitara su mano para mirar hacia abajo y darse cuenta que aún cuando se sentía destruido, solo había tomado la mitad.
— No más!
Zhan lo dejo caer en la cama para que separara más las piernas. En cada pequeño empuje el omega aruñaba un poco más.
El se retorció debajo del miembro que lo había elevado un par de veces mientras estaba en su regazo.
— Ahí está!
El alfa supo que había llegado donde quería cuando Yibo soltó un gemido entre dolor y placer. Su espalda se encorvo y sus ojos se pusieron en blanco la primera vez...
Para que se relajará un poco, succionó los dos botones rosados que estaban totalmente duros, los pellizco y los acarició antes de besar su cuello y acariciar desde el torso hasta sus nalgas amazandolas contra el hacia el interior haciendo que su propio falo se sintiera más apretado si podía ser.
El liquido viscoso fue liberado en mayor cantidad y así el alfa se atrevió a empujar contra el omega con las piernas a cada lado... Una vez y otra vez...