El área donde estaban no era concurrida, tampoco habían casas alrededor, pero si alguien los descubría...Definitivamente tendrían problemas.
Yibo besó a Xiao Zhan suavemente, pero alfa se sintió vilmente tentado, asi que apretó al castaño contra el volante...
Los pantalones que Yibo usaba eran algo ceñidos, así que Zhan buscó con sus manos las caderas y acariciando el trasero hizo que sus entrepiernas se juntaran...
El hecho de que él falo duro se pudiera sentir aún por encima de la ropa, le provocó al omega gemidos levantando su mentón. Zhan pasó su lengua por toda la extensión del cuello y succionó su manzana de adan... El cuero cabelludo del omega cosquilleo levemente, así se ubicó en el asiento de al lado en el acto confundiendo a Xiao Zhan. Quien agradeció que no hubiera nada alrededor... No quería que nadie percibiera a su omega.
Yibo en cambio no pensaba detenerse, solo deslizó su pantalón... Después de la comida y dormir... El sexo era su favorito también.
Y bajó la cremallera de Xiao Zhan, los ojos afilados del omega que solía ser un gato, brillaron con hambre y con necesidad al ver el boxer de color rojo humedecido y debajo de el, aquel objeto totalmente duro.
Yibo acercó su nariz y olfateo el aroma de su alfa. Sintiendo con ese simple hecho que sus rodillas se debilitaban.
Zhan estaba ansioso y la respiración de su omega contra su falo, casi imperceptible logró que su falo diera un respingo y otro... Yibo vio crecer aun más el falo frente a sus ojos y se relamio los labios antes de acercarlos impregnando la tela con su saliva. A Zhan no le importaba el desastre, pero su deseo, le hizo deslizar el resorte y empujar el rostro de su omega contra su erección.
Yibo besó la base y acarició los testigos, su arisco omega no se enojó... Al contrario gimió cuando el alfa jaló su cabello castaño hacia atrás exponiendo su cara para hundir sus propios dedos en la cavidad bucal.
— Mi omeguita... Es hora de comer.