Capítulo 35 (Penúltimo)

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A la mañana siguiente Singto y Krist tenían una cita pendiente.
Singto se despertó primero al oír a un ave cantar. Al abrir sus ojos vio lo más hermoso que él jamás imaginó ver.
A su pequeño novio iluminado por un rayito de sol, un poco despeinado y con sus labios totalmente rosas, aquel chico parecía tener una pesadilla. Movía su cabeza de un lado a otro mientras fruncía el ceño.
Singto lo veía tan tierno, parecía un niño.... ¿Así se veran los niños pequeños cuando duermen con sus padres? Se preguntaba Singto.
Singto enfocó una palabra en su mente: "hijos"
Se hubiera perdido en esa palabra, de no ser que sintió una mano halar su camiseta y aferrarse a ella. Era Krist parecía querer despertar y parecía que lloraba.
Singto que asustó y lo movió para despertarlo y lo logró, pero Krist despertó asustado y con lágrimas en sus ojos, vió a Singto y antes de que este le dijera algo. Krist lo abrazó y aferró su cabeza a el hombro de su novio.

Sg: ¿Tan mal estaba tu sueño?
Ks: Yo... yo...
Sg: Tranquilo si no quieres contarmelo aún, esperaré hasta que te sientas bien al decirlo.

Y una vez dicho eso, comenzó a acariciar la cabeza de su pequeño.

Sg: Vamos, tenemos una cita pendiente ¿Recuerdas?
Ks: Sí... -le dijo sonriendo-

El día fue bueno, fueron a una playa cerca y eso hizo a Krist despejar su mente. Aún que él pensara todavía en su sueño.
En el día, Sing y Kit fueron primero a un pequeño paseo en lancha, almorzaron y  después jugar en el mar, encontrar cangrejos o estrellas de mar. Buscar caparazones de ermitaños y piedras presiosas también.
Singto encontró una muy bonita, era una piedra azul cielo casi tranparente en forma de corazón.

Sg: Mira, es una piedra muy bonita.
Ks: Sí, es bastante hermosa. Eres un suertudo al emcontrar una piedra así.
Sg: Mmmmm, tengo una idea

Singto buscó algo filozo para romper aquella piedrita, pero encontró a un artesano que tenía un puesto cerca de la orilla.

Sg: Vamos allí. **Toma la mano de Krist y corren**

Krist se quedó viendo como Singto le mostraba la piedra al artesano mientras le contaba algo. De pronto el artesano lo regresó a ver y sonrió casi riendo levemente y asintió.
Parecía que algo le hacía a la piedrita y cuando se lo devolvió a Singto esté intentó pagarle pero el anciano le sonrió y se negó.
Singto parecía estar muy feliz y parecía agradecerle.

Sg: Listo, ¡ya quedó!
Ks: ¿Qué cosa?
Sg: Es una sorpresa impaciente.
Ks: ¿Ahora que tramas Sing?
Sg: Ya lo verás.

Como final del día, ambos decidieron ver juntos el atardecer sentados en la arena, Krist apoyado en el hombro de su novio y esté abrazandolo.
Cayó el sol, y simplemente fue hermoso; cuando Krist iba a decirle algo a Singto, pero al voltear a verlo, vío una parte de la piedra al frente suyo con la inicial "S".

Sg: Cuando no esté contigo, estas pulseras  nos unirán.

Singto le mostró otro que tenía la inicial "K".

Ks: Quiero esta **señala**
Sg: Pero esta tiene la inicial "S"
Ks: Lo sé, si tengo la letra "K" será igual que no tenernos. Es como si Krist, tuviera a Krist. Pero no quiero tener a Krist, quiero tener a Singto.

Singto le puso aquella manija y Krost se votó encima suyo para abrazarlo y darle un beso.

Ks: Desearía que estuvieramos siempre juntos.

Una vez dicho eso lo besó y así concluyó su cita.

El tiempo pasó rápido. Ya eran 2 meses del problema del que tuvieron.
Singto estaba por salir, necesitaba reunirse con el equipo de produción de Sotus.

Cumplir Lo Prometido ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora