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-¿Disculpa? -Cuestionó la rubia con molestia, todo el mundo se quedó callado, y entonces el rubio de ojos azules frente a ella comenzó a titubear

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-¿Disculpa? -Cuestionó la rubia con molestia, todo el mundo se quedó callado, y entonces el rubio de ojos azules frente a ella comenzó a titubear.

-B-Bueno, es que... -

-¡Deja de balbucear y dilo de nuevo! -Bramó la rubia tratando de acercarse para darle un buen golpe, sin embargo fue detenida por sus amigos.

-¡Y-Yo solo quería ayudar pero...!-

-¡Pero la cagaste de nuevo, Hanagaki! -Exclamó Dami furiosa. -¡No tenías por qué meterte en mis asuntos!

-Pero... pero...-

-¡Ahora todo está arruinado! -Exclamó Kazutora preocupado.

-Mikey nos va a matar. -Dijo Baji mientras se mordía las uñas.

-Ya valimos. -Lloriqueó Chifuyu, se recargo en la pared y comenzó a darse golpes en la cabeza.

-¡P-Puedo arreglarlo!

-¿Cómo mierda vas a arreglarlo? -Bramó la fémina. -Mikey, Draken, Yuzuha y Hakkai llegan en menos de media hora, y el puto pastel está en el suelo.

Ella señaló el pastel, y todos miraron hacia ahí, en donde Mitsuya trataba inútilmente de darle forma, recogiendo los pedazos del suelo.

-El peor cumpleaños de Hakkai. -Seguía lloriqueando Chifuyu.

-Iré por otro. -Dijo Takemichi asustado por como lo veía su hermana.

-No, no irás por otro. -Gruñó ella acercándose peligrosamente a Takemichi. -No vas a salir de aquí.

-¿¡Eh!?

-Dami, no cometas suicidio, eres muy joven para eso, la prisión es un lugar horrible. -Dijo Kazutora sosteniéndola por la cintura.

-No, me refiero a que Takemichi se va a encargar de entretener a esos cuatro en cuanto lleguen aquí, vas a tener que mover el culo o lo que sea para entretenerlos, mientras tanto nosotros iremos a buscar un pastel sustituto.

-Ah, que alivio, creí que ibas a...-

-Y después regresamos para asesinar a Takemichi.

-¡Joder que no!

-¡Déjame, mugroso!

-¡La prisión es horrible!

-¡No me importa!

Los chicos sacaron a Dami de la casa de los Sano y entonces Takemichi se quedó junto a Emma.

-¿Así que... gallina? -Sonrió divertida Emma mientras que Takemichi se puso nervioso. -¿Le dijiste a Hina que viniera?

-A-Ah, s-si, pero dijo que n-no podía.

-¿Por qué estás nervioso? ¿Te pongo nervioso? -Sonrió burlona la rubia.

Don't Leave Me [Tokyo Revengers] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora